Adolfo Córdova
Agencia Reforma
Ahora, le toca a los niños ser quienes le lean a sus madres. Estas opciones despertarán su imaginación, alegría y algunos recuerdos.
Canciones
del Colibrí
Mariana Ruiz Johnson, Castillo
¿Qué canciones escuchaba tu mamá de pequeña? Este libro reúne arrullos y rondas que se han interpretado desde hace muchas décadas en América Latina. Tal vez conoces algunos, tal vez ella sea la experta en la materia. Canten y jueguen con “Naranja Dulce”, “Arroz con Leche” y “La Víbora de la Mar”. Incluye disco compacto.
¿Qué Tal Si.?
Anthony Browne, FCE
Joe irá solo, por primera vez, a una fiesta, así que se pregunta ¿Y si hay gente desconocida? ¿Qué tal si no le gusta la comida? ¿Y si le dan miedo los juegos? Su mamá lo acompaña a la puerta de la reunión y se despide;
ahora será ella la que se pregunte ¿Estará bien? ¿qué tal que la está pasando mal?
Letras Robadas
Triunfo Arciniegas y Claudia Rueda, Océano
Cuando Clara escribe, algunas veces se come las letras y le saben a mermelada. El sábado acompaña a su mamá al mercado y observa que algunas letras faltan en los letreros que dicen “fruta”, “queso” o “pescado”. Así, ve correr una pista del misterio y debe soltar la mano de su madre para seguirla y entender qué está pasando.
Issun Bôshi
Icinori, Ediciones Ekaré
Seguro tu mamá te contó la historia de Pulgarcito, ahora cuéntale tú la de Issun Bôsni, un niño un poco más alto que un pulgar que quería grandes aventuras; así que un día se va de casa y se encuentra con un ogro al que hace enojar. Si éste ser vuelve, él tiene una aguja que le dio su madre para defenderse y una princesa muy bella por la que vivir.
El Piloto
y El Principito
Peter Sís, Sexto Piso
Todos saben quién es “El Principito”. Tal vez tu mamá lo recuerde del libro que leyó de niña; así que le encantará conocer más sobre su autor, Antoine de Saint-Exupéry, un niño con los cabellos dorados al que decían “el Rey Sol”, que construyó su primera máquina voladora a los 12 años y un día, siendo piloto, desapareció en el cielo.
Cuentos
del Bosque
Leticia Ruifernández, Ediciones Ekaré
Cuando Emilio oye decir a su madre que ha llegado la primavera, se pregunta dónde encontrarla. Así, viaja al bosque, donde toca el tambor, sube y baja lomas de piedras y escucha los pájaros; además, llevará a su hermana a jugar a la fortaleza e intentará mostrarle las luciérnagas. La naturaleza canta y cambia con las estaciones. Emilio también.