Por Natalia Vitela,
Agencia Reforma
La dependencia emocional hacia la mamá, especialmente por parte de los varones, origina que éstos tengan poca capacidad de decisión y con ello dificultad para resolver sus conflictos e incapaces de construir un proyecto de vida, Esta dependencia sucede cuando las mujeres sobreprotegen a los hijos. Son mujeres que promueven que sus hijos se deban a ellas y éstas a ellos. Les cuesta trabajo la individuación y con ello la independencia. Son incapaces de definir un proyecto de vida, es decir, su profesión, su ocupación. Además, dejan de pensar en sí mismos y sólo les interesa ser aceptados o reconocidos por su mamá.Una forma de identificar esta dependencia es cuando las personas no pueden tomar decisiones sin antes consultarlo con la madre. Es indispensable que quienes sufren esta dependencia reciban tratamiento psicoterapéutico y cortar este tipo de vínculos. Las mamás también deben acudir a terapia. Son mamás que se victimizan, son manipuladoras, los chantajean y los llenan de culpa.