AUSTELL, Georgia, EE.UU. (AP) — Dóciles riachuelos se convirtieron en marejadas incontenibles después de días de tormentas en el sudeste del país, con un saldo de por lo menos ocho muertos y comunidades enteras anegadas. Las precipitaciones arrojaron hasta 50 centímetros (20 pulgadas) de lluvia.
La Agencia para la Gerencia de Emergencias de Georgia dijo que hubo otra muerte en el condado de Douglas, al este de Atlanta, con lo que suman 4 las personas fallecidas en ese condado.
“La lluvia que cae no tiene dónde desagotarse”, dijo el climatólogo de Georgia David Stooksbury el lunes. “Esta lluvia, sobre terrenos ya saturados, empeora la situación”.
La fuerza de las aguas arrasó con una casa rodante en el oeste de Georgia y arrebató a un niño de dos años de los brazos de su padre. En Atlanta, los automovilistas atrapados se treparon a los techos de sus vehículos cuando el nivel de las aguas empezó a subir en una de las carreteras más transitadas de la ciudad. En el norte, las cuadrillas trabajaban para apuntalar un terraplén y contener un río crecido.
Las autoridades pidieron a las personas que no necesiten conducir que se queden en sus casas, al día siguiente que el gobernador Sonny Purdue declarara el estado de emergencia en 17 condados.
“Va a ser una larga mañana. Hemos pedido a la gente que tenga paciencia”, dijo la vocera del Departamento del Transporte Crystal Paulk-Buchanan.
La buena noticia es que disminuyó la lluvia en muchas zonas. Empero, el Servicio Nacional Meteorológico que volverá a llover, aunque la cuantía y posibilidad disminuirán en los próximos días.
Las imágenes aéreas mostraban escuelas, campos deportivos y vecindarios enteros sumergidos en agua.
Cuando el frente de tormenta avanzó sobre el oeste de Georgia, convirtió un arroyuelo en un río caudaloso que destruyó la casa rodante y se llevó al niño Preston Clade Crawford de 2 años a las 2 de la mañana. El cadáver del pequeño fue hallado horas después. Sus padres fueron rescatados de las aguas junto con otro hijo, Cooper, de un año, en el condado Carroll, al oeste de Atlanta.
Por lo menos había dos desaparecidos, incluso un hombre de Tenesí que fue a nadar a una zanja anegada para ganar una apuesta de 5 dólares y un muchachito de Georgia de 15 años que había ido a nadar al crecido río Chattooga. Unos 12.000 residentes se quedaron sin suministro eléctrico el lunes por la noche.