Por Sandra Maqueda
¡La temporada de invierno ya está aquí! aunque no de manera oficial pero ya las temperaturas nos lo hacen sentir. Con este bajón de temperatura también se recienten dos aspectos importantísimos del ser humano, nuestra salud física y nuestra salud mental. Por un lado empezamos a ver a personas estornudando por aquí y por allá con los ojos aguados o llorosos, las narices de Rodolfo el reno y bueno hasta con cubre bocas. Claro, ya está aquí la época del famoso Flu, que no es otra cosa que la gripe o gripa ambas están bien dichas y hay que vacunarse. Incluso ahora en algunas empresas es obligatorio ponerse esta vacuna sobre todo aquellas en las que se mantiene contacto con pacientes o clientes constantemente.
Por otro lado está el aspecto mental, nuestra salud emocional, todo aquello que nuestros pensamientos nos provocan sentir. Depresión, tristeza, melancolía, miedo, estas son solo algunas de las emociones que en esta época del año muchas personas comienzan a experimentar. Si a eso le sumas la lluvia constante y el poco sol que tenemos en esta parte de los estados Unidos es lógico que nuestro estado de ánimo naturalmente cambia. El fenómeno de la migración acarrea mucho sufrimiento y dolor para aquellos que han dejado sus hogares y a sus familias para venir en busca de una vida mejor, aquellos que se encuentran solos en estas tierras del norte suelen extrañar más a su gente y sus tradiciones en esta particular época del año, hecho que mantiene aún más en depresión a un gran sector de la comunidad. Así que en esta época de fin de año tenemos un reto más que enfrentar en el Noroeste y aun que suena algo dramático, la verdad es que es mucho más fácil de lo que creemos, es solo cuestión de actitud.
Primeramente en cuanto a nuestra salud física, vacúnese, es importante como tema de salud pública seguir las indicaciones de las autoridades de salud en el lugar donde vive o trabaja y si usted es de los que no cree en las vacunas porque piensa que es puro negocio para la industria, entonces tiene que poner extrema atención en sus cuidados personales. La nutrición es vital sobre todo en estos casos, es muy importante que esté recibiendo los nutrientes adecuados para poder soportar cualquier virus o enfermedad inesperada. Nadie dice que los que se vacunan ya no se van a enfermar y que no importa su alimentación, por el contrario para mantener un sistema inmunológico fuerte hay que comer suficientes macro nutrientes como lo son las proteínas, carbos saludables y grasas buenas (omegas) así como fito-nutrientes que encontramos en los vegetales y las frutas. Hay que beber mucha agua en esta época a pesar de no sentir sed, si empieza a tener síntomas de resfriado, cúbrase el pecho y las vías respiratorias con una bufanda, use gorros, guantes y zapatos para la temporada. Tome constantemente té, de eucalipto, menta o hierbabuena incluso de jengibre, son ideales para hidratarse y descongestionar. Y un llamado especial a los que después de vacunarse siente que les da más fuerte y se ponen muy mal, coméntenlo con su proveedor de salud ya que puede que usted sea alérgico a algún componente de la vacuna.
En verdad es súper importante estar atentos a nuestra salud tanto física como emocional en estos próximos meses ya que la realidad que se vive año tras año en estas fechas es el aumento en el número de personas que no logran detectar sus profundos niveles de depresión y se quitan la vida o terminan en el hospital o la cárcel después de un accidente causado por manejar bajo la influencia del alcohol o las drogas. La salida fácil que muchos migrantes eligen, termina siendo su condena, trabajan para sus vicios y terminan rechazando todo el porvenir que este país ofrece, se olvidan de su sueño y de sus familias y se quedan estacionados en una zona de confort de la que muchas veces no salen. Tenemos que aprender a reconocer que nuestros retos como migrantes son muchos, pero afortunadamente todos se pueden superar, la salud física y la mental van de la mano y esta vez no podemos dejar esto de lado porque ¡con salud todo sin salud nada! Siempre habrá una mano para ayudarte solo ábrete a recibir la ayuda, el maestro aparece cuando el alumno está listo. Existen muchos centros comunitarios y clínicas publicas sonde dan clases gratis sobre nutrición y también existe asistencia con problemas de salud mental, alcoholismo, violencia doméstica, etc. Solo atrévete a cuidar de ti y que este fin de año sea el inicio de la mejor etapa de nuestras vidas, porque todos somos uno.