SEATTLE– La alcaldesa Jenny A. Durkan y el fiscal de la ciudad Pete Holmes anunciaron que la ciudad de Seattle se ha unido a una coalición de estados y ciudades en una demanda para impedir que el gobierno de Trump solicite información sobre los ciudadanos en el Censo 2020 decenal, y preservar un recuento preciso y justo. Seattle se une a una coalición de 18 fiscales generales, seis ciudades y la Conferencia de Alcaldes de EE. UU. bipartidista para responsabilizar al gobierno de Trump por violar la Cláusula de Enumeración de la Constitución de los Estados Unidos.
“Donald Trump y su gobierno quieren realizar el Censo como se hacía en la década de 1950 con una propuesta inconstitucional, injusta e irrazonable. Nuestro estado y ciudad se unieron para combatir este intento del gobierno de Trump por reprimir la democracia, quitarle a nuestra comunidad los recursos extremadamente necesarios y el recuento insuficiente de las comunidades de color e inmigrantes”, explicó la alcaldesa Durkan. “En la última década, la población de Seattle ha aumentado considerablemente, por lo que es sumamente importante que el próximo Censo nos brinde una representación precisa y justa. Sin un recuento preciso, Seattle podría perder miles de millones de dólares de las inversiones federales en lo que respecta a viviendas, escuelas y hospitales, y otros recursos federales importantes”.
“La ciudad de Seattle se compromete a hacer todo lo posible para garantizar que tengamos un Censo 2020 constitucional y preciso. Me enorgullece unirme a otras ciudades y estados en esta demanda para pedirle al gobierno federal que siga la Constitución y que el recuento sea justo para todos”, afirmó Holmes, el fiscal de la ciudad.
“Tenemos el deber de representar a más de 700 000 personas que viven en Seattle y sin la información precisa del Censo 2020 no podemos cumplir con nuestras responsabilidades de proteger adecuadamente la salud y la seguridad de nuestra comunidad”, explicó Teresa Mosqueda (puesto 8, a nivel de la ciudad). “Seattle debe liderar el camino y luchar contra cualquier intento de debilitar el proceso del Censo 2020, exacerbar la desconfianza con el gobierno o dañar nuestra capacidad para atender las necesidades de nuestra población”.
Conforme a la Constitución, la Oficina del Censo tiene la obligación de determinar “el número total de personas en cada estado”. Sin embargo, se espera que la demanda de información sobre los ciudadanos en el Censo disminuya la participación de los inmigrantes, lo que ocasionaría un recuento insuficiente de la población que dañaría desproporcionadamente a los estados y las ciudades con grandes comunidades de inmigrantes. Además, aquellas personas que no son ciudadanas se cuentan en el Censo para fines relacionados con los fondos federales, la asignación de lugares en el congreso, los votos del Colegio Electoral, y el trazado del estado y los distritos locales.
El 12 de diciembre de 2017, el Departamento de Justicia de los Estados Unidos solicitó que la Oficina del Censo demandara la información sobre los ciudadanos en el formulario del Censo 2020 que se envió a cada hogar de los Estados Unidos, a pesar de que el Censo supone contar a todas las personas, ya sean ciudadanos o no ciudadanos. La demanda que se presentó hoy se lleva a cabo según la Cláusula de Enumeración de la Constitución de los Estados Unidos, ya que dicha acción del gobierno de Trump impedirá una “enumeración real” requerida por la Constitución.
Obtener un recuento preciso del Censo es crucial para el presupuesto de Seattle. En 2015, el estado de Washington recibió aproximadamente $13 700 millones de dólares de programas asistenciales federales según los datos del Censo decenal. En términos de asignación anual, eso equivale a un financiamiento significativo por persona para vivienda, educación, cuidado de la salud, infraestructura, proyectos de transporte y otros programas financiados por el gobierno federal. Asimismo, para Seattle, el mayor interés es determinar cómo se usa la base de las estimaciones de la población del estado para determinar la asignación de aproximadamente $200 millones del fondo general estatal a condados y ciudades anualmente.
Entre el 2000 y el 2014, la población de inmigrantes en Seattle creció un 20 % comparado con el 14 % de la población total. En Seattle, el 21,3 % de la población habla otro idioma que no sea inglés en su hogar. Según la Encuesta sobre la Comunidad Estadounidense del 2014 y el distrito escolar de Seattle, se hablan 129 idiomas en las escuelas de Seattle.