Reflexión
La Raza del Noroeste
El episodio del abuso contra un joven hispano, por parte de la policía de Seattle, durante la investigación de un asalto, sí tuvo, en nuestra opinión, un tono racista.
Y además, creemos que es un episodio peligroso para todos.
Es racista; la policía tiene derecho a insultar sospechosos; es parte de su necesidad de no mostrar miedo, de mostrar poder y fuerza frente a posibles criminales.
Y, cuando usted va a insultar a una persona, lo primero que viene a su mente, es aquello que desprecia de esa persona, aquello que hace que no sienta respeto o consideración por el insultado.
La palabra “Mexicano”, fue lo primero que salió de la mente del detective Shandy Cobane para insultar al sospechoso.
Eso es racismo.
Tambien es peligroso; la comunidad hispana, en su gran mayoría, viene de países y regiones donde la policía, desafortunadamente, no siempre sirve con honestidad y buenas intenciones.
A nosotros nos cuesta respetar la fuerza pública, porque, de donde venimos, muchos de ellos son corruptos.
Por eso esas imágenes duelen tanto, porque a los insultos del detective se suma la actitud impávida de los demás policías; por eso es importante que se conozca si alguno de ellos incluyó el incidente en su reporte, antes de conocerse que había un video particular.
Nosotros debemos creer en la policía, existen para proteger a las personas de bien, y la gran mayoría de quienes formamos la comunidad hispana en la región del Puget Sound, somos gente buena.
Pero necesitamos saber que el organismo del gobierno, que existe para protegernos a todos los habitantes, no distingue razas, culturas o credos, al ejercer su oficio.