Jorge Rivera

LR

Nuestra historia de primera plana esta semana relata los puntos notables y conclusiones de un evento en Español para informar sobre el problema de las pandillas. Un evento de muchos que suceden en el noroeste sobre este tema, y que desafortunadamente no suceden en Español tanto como quisiéramos. Porque la realidad es que, por varios motivos, nuestros muchachos son presa fácil de ser influídos por malas amistades, y convertidos en pandilleros. Los esfuerzos de Familias Unidas en Everett, y otras organizaciones hispanas a los largo del Puget Sound, deben ser aplaudidos una y otra vez, publicados y recordados. Pero, como dice la señora Winnie Corral, Directora de este centro comunitario, el problema de las pandillas ¿es problema de todos¿. Es uno de esos temas en que nosotros debemos hacer esfuerzos para integrarnos más en la comunidad de padres del Noroeste, no importa el origen o el idioma. Porque solo la permanente consciencia de este peligro puede evitar que nuestros muchachos sean víctimas. Nuestros niños viven una vida distinta a la nuestra, la mayoría habla inglés perfecto porque lo aprende en la escuela, y si nosotros no lo hablamos, ellos empiezan a crear un ¿sub mundo¿, del que nosotros no somo parte ni podemos influir positivamente. Por eso es importante apoyarse en estas organizaciones que sirven de ¿puente¿ para nosotros, en un tema tan delicado. La comunicación con los muchachos y la búsqueda permanente de recursos de ayuda en nuestro idioma son muy importantes. Nosotros seguiremos comunicando estas actividades.