SEATTLE (AP) — Dos dueños de una compañía para reconstruir motores que sufrió una redada en enero, creando preguntas sobre prácticas federales con indocumentados, fueron sentenciados el lunes pasado a un año de libertad conidcional y su negocio debe de pagar una multa de $100,000.
Shafique Amirali Dhanani y Shirin Dhanani Makala, directores corporativos, gerentes y dos dueños de la empresa familiar Yamato Engine Specialists 1990 Ltd. de Bellingham, Wash., se libraron de pasar tiempo en prisión, multas y costos de la corte por acuerdos antes del juicio el lunes en una carta al Juez de Distrito James L. Robart.
Yamato se declaró culpable el lunes y aceptó pagar la mitad de la multa inmediatamente y el resto para diciembre 31. La compañía también debe de usar media página de aviso en el periódico The Bellingham Herald para describir como se metió en problemas por contratar a trabajadores sin documentos.
“Estos no son los crímenes más serios. No son los más violentos. No involucran armas o drogas”, dijo Robart, “ pero son importantes…este es un asunto serio”.
Dhanani y Makala, hermano y hermana de una familia proveniente de Uganda, se declararon culpables en agosto. Podían haber sido sentenciados a por lo menos cinco años en prisión y multas de $250,000, y la compañía pudo haber recibido una multa de $500,000.
De los 28 trabajadores que fueron arrestados el 24 de febrero, uno regresó a México y el resto se les dio permiso de trabajo temporales para permanecer en país hasta la conclusión del caso criminal.
Con la sentencia, estos permisos han expirado y los 27 se enfrentan a juicios de deportación que pueden durar hasta “varios meses”, de acuerdo a Lorie Dankers, portavoz de ICE.