El gobierno de México anunció el lunes que repatrió a su país al ecuatoriano que sobrevivió a una masacre de 72 migrantes centro y sudamericanos, presuntamente a manos de un cartel de las drogas.

Las secretarías de Gobernación y de Relaciones Exteriores informaron en un comunicado que el ecuatoriano Luis Freddy Lala Pomavilla fue repatriado la noche del domingo en un avión de la Fuerza Aérea de Ecuador.

El canciller Ricardo Patiño, en rueda de prensa, dijo que Lala llegó el domingo a Ecuador, donde “está protegido, está atendido médicamente … hasta que se recupere completamente” y que su familia también goza de protección.

Pidió a “los medios de comunicación que no se den la tarea de buscar al sobreviviente, por favor no le hagan daño, se que todos compartiremos que él está en una grandísimo riesgo… cualquier cosa que hagamos para decir donde está, identificar algo, le puede hacer mucho daño”.

El ministro de Seguridad Interna y Externa, Miguel Carvajal, dijo que “es muy importante que se considere … la exposición que tienen todos nuestros compatriotas que migran por vía ilegal a Estados Unidos”.

“Lo que acabamos de vivir con Freddy y las 72 personas asesinadas de manera vil en México, es una situación que nos conmueve a todos y que tiene que obligarnos a todos a tener conciencia de la situación” de la migración ilegal, agregó.

México había ofrecido a Lala una visa humanitaria para permanecer en el país, aunque el migrante la rechazó y prefirió ser devuelto a Ecuador.

Infantes de marina localizaron la semana pasada los cadáveres de 72 migrantes en un rancho del estado norteño de Tamaulipas, uno de los más afectados por la violencia atribuida a una disputa entre los carteles de Los Zetas y sus antiguos aliados del Golfo.

Lala logró escapar y, herido, llegó hasta un retén de la Marina y contó sobre la masacre.

Una sola persona está detenida por su presunta participación en los hechos: un joven que declaró tener 16 años, pero que las autoridades determinar a través de una certificación médica que por lo menos tiene 18 años, es decir, es mayor de edad.

La Procuraduría General de la República informó el lunes que un juez concedió una orden de prisión preventiva por 40 días para el joven identificado como Eduardo Rico Pérez, una medida para continuar las investigaciones y determinar si hay elementos para presentar cargos formales en su contra.

A raíz de los hechos, los gobiernos de México y Ecuador manifestaron su voluntad de trabajar “de manera estrecha y coordinada en la definición de políticas migratorias, en la defensa a los derechos humanos y en el combate a la criminalidad que afecta a los migrantes de todas las nacionalidades en su camino a los Estados Unidos”, señalaron en el comunicado las dependencias mexicanas.

El acto para la repatriación se realizó en el hangar de la Secretaría de Marina de la capital mexicano, donde estuvieron autoridades de los dos países y un grupo de paramédicos que atendieron a Lala.

Lala dijo a las autoridades que cuando el grupo de migrantes se dirigía hacia Estados Unidos fueron interceptados por desconocidos que se identificaron como miembros de Los Zetas y quienes los asesinaron tras no haber aceptado trabajar para ellos.

Las autoridades de México sólo han identificado a 31 de las 72 víctimas, pero los países de donde procedían han informado de la identidad de 35: 16 hondureños, 13 salvadoreños, cinco guatemalteco y un brasileño.

El subsecretario de Asuntos Consulares de Ecuador, Leonardo Carrión, en declaraciones a radio Sonorama, dijo que “hasta ayer al mediodía no había ningún resultado positivo de identificar (a algún ecuatoriano)” muerto en esa masacre.