Por Cariño Barragán Talancón y Colleen Fontana

La temperatura de Rosa había alcanzado los 100 grados. Temblando y tosiendo, le llamo a su patrón para decirle que no podía ir a trabajar. El próximo día se presentó a trabajar y le informaron que estaba despedida. Frustrada y confundida, pregunto, “¿Porque me despides?” El patrón insistió que tenía el derecho de correrla en cualquier momento. El patrón dijo que tenía el derecho bajo la ley de empleo por voluntad. Lo cual significa que los patrones pueden despedir a los trabajadores en cualquier momento y por cualquier motivo.

Javier tuvo un problema similar. Un día se le ocurrió revisar su talón de cheque y notó que no le habían pagado sus horas extras en su último cheque. Cuando se lo comento a su supervisor, lo corrieron. La explicación que le dio el supervisor fue que tenía el derecho por la ley de empleo por voluntad.

Laura también tuvo esta situación. Después que un compañero la molesto por hablar español, lo reporto a recursos humanos. Para la siguiente semana, todos los trabajadores hispano-hablantes fueron despedidos. Otra vez, la excusa que le dieron fue: la ley de empleo por voluntad.

¡Pero lo patrones no siempre tienen la razón! Sus acciones si pueden ser ilegales y aquí explicamos porque:

Es cierto que en el estado de Washington los patrones tienen el derecho de aplicar la ley de empleo por voluntad. Repetimos, esto significa que a los trabajadores se les puede despedir en cualquier momento por cualquier motivo. Sin embargo, esto no significa que tienen el derecho de tomar represalias (acciones negativas) contra los trabajadores que exigen que les respeten sus derechos.

Rosa tiene el derecho de enfermarse y quedarse en casa. A través de todo el estado de Washington, los trabajadores tienen el derecho de acumular horas de enfermedad pagadas y usar esas horas cuando uno se enferma o hasta para cuidar de los familiares más cercanos cuando ellos se enferman. Esta ley aplica a todos los empleados sin importar si trabajas para una compañía grande o pequeña, una organización comunitaria, o para un contratista. No importa si trabajas tiempo completo, tiempo medio o por temporada. Bajo esta ley, tienes el derecho de saber cuántas horas acumulas y que esta información aparezca en tu talón de cheque para que sepas cuantas horas has acumulado.

De igual manera, Javier tiene el derecho de ser pagado por todas las horas trabajadas. Fue ilegal que el patrón lo despidiera por exigir que le pagara sus horas extras. Esto es una represalia. Las horas extras deben ser pagadas a tiempo y medio. Esto significa que, si te pasas de las 40 horas en una sola semana de trabajo, te deben pagar el pago regular más la mitad por cada hora extra. Las horas extras no se deben contar después de 80 horas en la quincena. ¡Esto es un gran error! Por ley se deben contar después de trabajar más de 40 horas cada semana.

Laura también tiene el derecho a trabajar en un lugar seguro. Al reportar el acoso de su compañero de trabajo, ella estaba exigiendo respeto de sus derechos civiles. En este tipo de casos, lo mejor es presentar una denuncia de posible discriminación. El hecho de que corrieron a todos los trabajadores que hablan español podría ser una forma de discriminación de origen.

¿Alguna vez te ha pasado algo así? ¡Denúncialo! En este estado tenemos muchas protecciones sin importar si tenemos papeles o no. Algo muy importante de recordar es que hay límites de fechas para cuando podemos presentar una denuncia. Si crees que tu despido fue injustificado o si te ha sucedido otra situación en el trabajo que te pareció injusta, actúa pronto. Y si no estás segura que debes hacer, puedes llamar a nuestra línea de información para tener una consulta gratuita sobre asuntos laborales. Llámanos al 206.745.2045 (No Somos Abogados).