El Calor causa tragedia hispana

Por Katya Yefimova & Jackson Holtz

The Herald

La muerte de un niño es la mas injusta y absurda de las tragedias. Es algo que a todos nos cuesta aceptar, que no queremos, porque la muerte de un niño es el final de una vida que está comenzando, es el fin de un futuro completo, de una esperanza completa. Y es inaceptable tambien porque casi nunca, o nunca, es responsabilidad del menor, un niño no razona ni conoce de peligros, y un bebe, como en el caso de esta semana, es simplemente una víctima. El dolor de la tragedia que reportamos en nuestra primera plana esta semana, se siente más fuerte la madre y el niño son hispanos como nosotros. No podemos más que preguntarnos ¿Qué se puede hacer para evitar estas tragedias?. Es cierto, la fatalidad llega cuando llega, pero hay tragedias evitables; la pobre mujer que perdió su hijo esta semana, y que llevará el dolor de su tragedia por siempre, pudo haber sabido del peligro en que dejaba al niño, pudo haberlo prevenido. No es misión de este periódico juzgar a una mujer de 21 años, que estaba trabajando, por dejar desatendido a su hijo, aunque en principio es reprochable, y ante la ley es ilegal. Pero no es un error de maldad, quizás ni siquiera de descuido. Consideramos que es, tristemente, pecado de ignorancia. Menos gentes de las que creemos saben del riesgo que el calor representa al interior de un automóvil, y muchos no sabían que las temperaturas subirían tanto el Lunes, en esta región del país. La falta de información es uno de los males más grandes que sufrimos los inmigrantes, y muchos tristemente no saben lo que no saben, y no saben que pueden enterarse, aprenderlo. Por eso, aunque en principio parezca que poco se puede hacer, realmente es mucho, pero es sobre todo informar, Nuestra gente necesita enterarse, conocer de los riesgos; si usted tiene amigos o familiares que no ven importancia en aprender, en estar enterados, en leer los medios locales por ejemplo, cuénteles, invítelos a enterarse. Estas muertes injustas son evitables, y la información preventiva existe; ayudemos todos a divulgarla.