Por el Consulado de México
en Seattle
Pablo Castillo
Don Pablo Castillo es el flamante galardonado del Ohtli, máximo reconocimiento que otorga el Gobierno de México a miembros de la comunidad mexicana en Estados Unidos. Orgullosamente charro, ha forjado su nombre en la historia de la comunidad mexicana en el Pacífico Noroeste de Estados Unidos.
Muchas personas lo describen cariñosamente como “la enciclopedia charra andante”. Es cierto. Don Pablo vive y respira este tradicional deporte. “Yo soy charro desde antes de nacer”, dice cálidamente.
Una conversación con Don Pablo traslada inmediatamente al lienzo, donde el jaripeo y el floreado, o suertes charras como la escaramuza o cola de caballo fluyen naturalmente. Un testigo viviente de pasajes históricos en la charrería, su pasión, emoción y conocimiento contagia a quien escuche.
La familia Castillo vivió en la Ciudad de México durante muchos años. Siguiendo los pasos de sus padres y abuelos, se involucró en el deporte de la charrería desde pequeño. Además, es un apasionado de la historia. De niño frecuentaba el Centro Histórico, donde caminaba cerca la Catedral Metropolitana y pasaba horas en las tiendas de libros antiguos, acumulando conocimiento sobre la historia de la charrería. “La historia de México y la charrería están mucho más atadas de lo que la gente cree”, señala.
Hace más de 30 años, Don Pablo llegó al estado de Washington, junto con su madre y una hermana. En ese entonces desconocían cuánto tiempo estarían aquí. Lea la nota completa en LaRazaNw.com