Por JACOB ADELMAN
LOS ANGELES (AP) — Un grupo neonazi protestó el sábado en en centro de Los Angels contra la inmigración ilegal, mientras cientos de personas se reunieron en una contraprotesta para condenar el racismo, gritando consignas contra los supremacistas, en una tensa confrontación que incluyó algunas agresiones a pedradas y la intervención de la policía antimotines.
Una valla formada por agentes antidisturbios separó a ambos grupos en el prado sur del palacio del ayuntamiento, donde medio centenar de miembros del Movimiento Nacional Socialista agitaron banderas estadounidenses y otras con la esvástica, durante aproximadamente una hora.
Cinco personas, todas ellas de la protesta en contra de los supremacistas, fueron arrestadas bajo sospecha de haber arrojado objetos, informaron las autoridades.
Los neonazis, muchos de los cuales llevaban cascos y uniformes militares negros, gritaron “sieg heil”, la frase de “salve la victoria” utilizada frecuentemente durante el régimen nazi en Alemania, antes de que cada uno de sus dirigentes subía al podio para enardecer a sus rivales con insultos raciales, antisemitas y misóginos.
“Los enfrentaremos de frente”, dijo uno de los líderes de los supremacistas, cuyo nombre no se pudo escuchar por la mala calidad del sonido y eran resguardados por varias filas de de policías con trajes antidisturbios.
Los manifestantes del grupo supremacista con sede en Detroit indicaron que habían elegido la alcaldía de Los Angeles como la sede de su manifestación por la amplia población migrante de la ciudad. Ellos acusaron a los inmigrantes de robarse los empleos y de cometer delitos.
Además, integrantes del grupo indicaron que se trataba de una reacción ante la serie de manifestaciones callejeras que se han efectuado en todo el país en las que se ha solicitado una amnistía para algunos inmigrantes indocumentados.
El director regional del Movimiento Nacional Socialista, Jeffrey Russell Hall anunció que el grupo respaldaría a los candidatos que tuvieran el mismo mensaje antiinmigrante.
Sin embargo, las palabras de los manifestantes supremacistas fueron eclipsadas por los coros de “¡váyanse, racistas!” y “detengan a los nazis”, que emitieron unos 500 participantes en la contraprotesta, quienes mostraron además carteles que decían: “Nazis, váyanse de Los Angeles” y “Los racistas son ignorantes”.
Se suscitó un conato de violencia cuando un individuo se quitó la camiseta y exhibió tatuajes que algunos manifestantes consideraban ofensivos. La policía se llevó al tatuado a un lugar seguro.
James Lafferty, director general de la Asociación nacional de Abogados y participante en la contraprotesta, dijo que el sujeto tatuado lanzó algunos golpes y patadas mientras un agente vestido de civil lo llevaba detrás de la valla formada por la policía.
Podía verse sangre en su cuello, relató Lafferty.
Cuando concluyó la manifestación, algunos participantes en la contraprotesta lanzaron piedras, palos y otros objetos sobre la valla policial, hacia los neonazis.
No se reportaron heridos ni estaba claro si hubo detenciones, dijo la agente policial Wendy Reyes.