Alejandro Dominguez
La Raza del Noroeste
Benjamín Núñez Márquez vino de México cuando tenía 22 años y empezó a trabajar en un aserradero en Orcas Island.
Fue subiendo de rango en la pequeña compañía, aprendiendo habilidades y convirtiéndose en la mano derecha de su jefe.
“Tiene 90 años, cuando necesita cosas fuera de la isla, yo voy con él para manejar y estar pendiente de él”, dijo Núñez.
El 3 de marzo del 2008, estaba llevando a una mujer que estaba sufriendo de derrame cerebral por el ferry cuando fue detenido por un agente de inmigración.
Estuvo detenido por una semana en el Centro de Detención del Noroeste en Tacoma, y a partir de entonces ha estado en una batalla legal para alargar su deportación y quedarse aquí.
Y aunque él está pasando por la presión que cientos de inmigrantes y sus familiares pasan cuando tienen una orden de deportación, Núñez, ahora de 38 años, tuvo la suerte de que toda una comunidad americana se puso a su lado para que no lo deportaran.
Tiene hasta senadores y congresistas de su lado pidiendo que se aplace su deportación por más tiempo.
“He tenido muchas amistades, pero me sorprendió que tanta gente me ha respaldado”, dijo Núñez.
La orden de deportación de Núñez ha sido aplazada cada año, dándole esperanzas de quedarse aquí. Tiene familia en México pero no tiene prospectos.
El próximo miércoles 16 de abril, Núñez y su jefe irán a corte para saber si recibe un plazo más o tendrá que presentarse para ser deportado al final del mes.
“La gente me pregunta que va a pasar, pero ni yo sé. Solamente inmigración sabe,” dijo.
Núñez tuvo mucho apoyo de la comunidad y ha salido en varios medios locales y nacionales. Se ha convertido en la imagen pública a favor de la reforma de inmigración.
No tiene esposa o hijos pero tampoco tiene antecedentes criminales.
Y cuando fue detenido, gente que lo conoce se enojó más con los agentes de inmigración debido a que estaba con un adulto mayor con emergencia médica.
Consiguió aliados importantes este mes.
Las senadoras Patty Murray, Maria Cantwell y congresistas Rick Larsen y Jim McDermott firmaron una carta el pasado 2 de abril pidiendo al Departamento de Seguridad Nacional que Núñez permanezca en el país debido a su importancia en su trabajo y por todas las llamadas y cartas que han recibido en apoyo a Núñez.
“Muchos creen que si el Sr. Márquez es deportado, el aserradero tendrá que cerrar. Los dueños y nuestros constituyentes insisten que esto tendrá un impacto negativo en la economía local de Orcas Island” dice la carta.
La carta termina pidiendo al secretario de Seguridad Nacional Jeh Johnson que considere el caso “bajo política y leyes migratorias.”
Núñez no sabe que va a hacer si va a ser deportado, pero si sabe lo que hará si permanece en el país por más tiempo.
“Yo voy a seguir trabajando, así es como yo festejo,” dijo.