Alza a impuestos en México, una bendición

Por ELLIOT SPAGAT, Associated Press

CHULA VISTA, California, EE.UU. (AP) — En los centros comerciales de ciudades fronterizas con México es común ver autos con matrícula mexicana. Lo será más porque México aumentará sus impuestos a las ventas en las regiones fronterizas para igualar la tasa a la del resto del país, dicen comerciantes.

El aumento del 11 al 16% al impuesto, que entra en vigor el miércoles, ha provocado fuertes protestas en el lado mexicano de la frontera. Páginas de Facebook con acento secesionista tienen más de 200.000 señales de “me gusta”. Miles han firmado peticiones para apelar el aumento ante la Corte Suprema.

El gobierno de México dice que la tasa diferenciada, que se creó hace dos décadas para hacer competitivas a las ciudades de la frontera, ya no se justifica. Otros dicen que la decisión puede ser contraproducente al provocar que los compradores crucen la frontera y generen menos ingresos de los que se espera captar.

“No competimos contra el resto de México, competimos contra la economía estadounidense”, dijo Juan Manuel Hernández, presidente del Concejo de Negocios de Tijuana, que agrupa a varias cámaras comerciales.

Regiones fronterizas de Estados Unidos, como Imperial Valley, California, que tiene tres súper tiendas Wal-Mart y sólo 175.000 residentes, dependen tradicionalmente de los compradores mexicanos que llevan desde gasolina hasta dulces. Ropa de diseñador y electrónicos son los imanes que los atraen ya que son productos que son más caros o difíciles de encontrar al sur de la frontera.

Los compradores mexicanos gastan más de 4.500 millones de dólares al año en ciudades fronterizas de Texas de acuerdo con el banco de la Reserva Federal de Dallas. Economistas de la Reserva calcularon en marzo que los mexicanos hicieron el 58% de las compras al por menor en Laredo y el 42% en McAllen.

Thomas Fullerton, profesor de Economía en la Universidad de Texas en El Paso, calcula que los mexicanos aumentarán sus compras en Estados Unidos entre un 5 y 10% debido al alza de impuestos. En ciudades pequeñas como Douglas, Arizona, y Calexico, California, se sentirá más el impacto que en otras mayores como San Diego y El Paso, cuyas economías están más diversificadas.

El gobierno del presidente Enrique Peña espera recaudar 1.150 millones de dólares con el aumento a los impuestos y es parte de un plan fiscal que también aumentó los gravámenes a negocios y personas con altos ingresos, acabó con ciertas deducciones y gravó la comida chatarra.

El gobierno dijo que los negocios fronterizos no reflejaron en sus precios al consumidor la menor tasa impositiva. Se encontró que los precios eran 4% más elevados que en el resto del país aunque los impuestos eran menores y señaló que otras entidades de Estados Unidos no permiten reducir los impuestos a negocios en la frontera.

Hernández y líderes empresariales de otros estados cuestionaron esos cálculos en una reunión con el ministro de Finanzas de México, Luis Videgaray, realizada en la ciudad de México en octubre. Le mostraron un estudio propio que señalaba que el precio de una canasta básica de bienes era 4% más barato en San Diego que en Tijuana, y 37% más que en la ciudad de México. Los estudios predecían consecuencias funestas y las pláticas no resultaron en acuerdos.

El alza a los impuestos provocó que se crearan páginas de Facebook con consignas como “República de Baja California” y “República de Chihuahua”.

El fin de semana unos 2.500 compradores firmaron una petición para impugnar el alza de impuestos ante la corte, dijo Hernández. El grupo empresarial de Tijuana está reuniendo miles de firmas para enviarlas a una corte federal a principios de febrero.

En Estados Unidos, los dirigentes empresariales se preparan para ver el aumento de sus ventas.

“Este aumento a los impuestos da a los mexicanos un motivo para comprar y gastar dinero en el lado estadounidense”, dijo Steve Ahlenius, presidente de la Cámara de Comercio de McAllen.

Hispana dirigirá sistema escolar más grande

@Byline:Por JONATHAN LEMIRE,

Associated Press

NUEVA YORK (AP) — La hispana Carmen Fariña, una ex maestra, directora y defensora desde hace mucho tiempo de la educación infantil, será la próxima líder del sistema escolar público más grande de Estados Unidos, anunció el lunes el entrante alcalde de la ciudad de Nueva York.

Fariña, hija de inmigrantes españoles que huyeron del régimen de Francisco Franco, también fue ex directora de las escuelas de la ciudad, traerá mucha experiencia e ideas nuevas para el trabajo, dijo el alcalde electo Bill de Blasio.

“Ella lo sabe porque lo ha vivido”, agregó.

“Esta es literalmente una de las decisiones más importantes que haré en mi mandato como alcalde y una de las más personales”, dijo de Blasio, cuyos dos hijos han asistido a escuelas públicas. “Hacerse responsable de las vidas de 1,2 millones de niños puede ser una de las misiones más sagradas en el gobierno en cualquier lugar en este país”, añadió.

Fariña ha sido asesora de hace mucho tiempo de de Blasio y ayudó a diseñar su temario político en lo que se refiere a la educación, inclusive la propuesta del alcalde electo de un prekínder universal y programas expandidos después de clases para estudiantes de escuela intermedia.

En una rueda de prensa en Brooklyn para el anuncio de su nombramiento, Fariña también habló de sus primeros años como estudiante de escuela pública. Dijo que al principio la trataban como si fuese invisible, porque era hija de inmigrantes españoles y tenía un apellido que al profesor le era difícil pronunciar.

“Es un gran privilegio ser capaz de volver a un sistema al que le falta mucho trabajo por hacer todavía, pero de poder hacerlo desde una posición de una agenda progresista”, dijo Fariña el lunes. “Aquí vamos a tener un sistema donde los padres son socios reales”, agregó.

De Blasio asumirá el cargo el 1 de enero y será el primer alcalde en la historia reciente que presida los cinco barrios de la ciudad mientras tiene uno de sus propios hijos en una escuela pública.

Fariña, de 70 años, se hará cargo del sistema escolar en un momento crucial.

El alcalde saliente Michael Bloomberg, un republicano convertido en independiente, fue elegido con la promesa de campaña de ser “un alcalde de la educación” y aumentó drásticamente el gasto público en educación.

Sin embargo, de Blasio, un demócrata, hizo campaña en contra de muchas de las políticas que Bloomberg defendió durante sus 12 años en el cargo, como el cierre de escuelas que fueron consideradas como un fracaso y el crecimiento de escuelas fletadas, dándoles espacio libre en edificios de escuelas públicas. De Blasio también ha criticado a la administración saliente por haber sido demasiado dependiente de los exámenes estandarizados.