Acuerdo con Irán, ¿promesa o error histórico?

Por JULIE PACE,

Associated Press

VIENA, Austria (AP) — Superando décadas de hostilidad, Irán y seis potencias mundiales concertaron el martes un acuerdo histórico que frenará los esfuerzos de Teherán para desarrollar una bomba atómica.

El acuerdo podría permitir a Irán acceder a miles de millones de dólares de activos congelados, aumentar ingresos por exportaciones petroleras y evitar una acción bélica de Estados Unidos en el Oriente Medio, además de impulsar una reconfiguración de la conflictiva región.

El convenio pone a prueba durante varios años la disposición de Irán a cumplir sus compromisos con el mundo y la capacidad de los inspectores internacionales para vigilar ese acatamiento.

También enfila a la Casa Blanca hacia un enfrentamiento con el receloso Congreso estadounidense, y complica aún más las relaciones con Israel, cuyas autoridades se manifestaron airadamente en contra del pacto.

En un exhorto a los escépticos, el presidente Barack Obama declaró que el acuerdo “ofrece la oportunidad de avanzar en una nueva dirección. Debemos aprovecharla”.

De acuerdo con las condiciones del acuerdo, alcanzado tras 20 meses de ardua diplomacia, Irán debe desmantelar gran parte de su programa nuclear para que le sean reducidas las severas sanciones que han mellado su economía.

Los inspectores internacionales podrán ahora exigir que se les permita visitar instalaciones militares en Irán, aunque el acceso no está garantizado. Las centrífugas continuarán funcionando, aunque en menor número, y el uranio seguirá siendo enriquecido, aunque a menores niveles.

En un compromiso crucial, Irán aceptó que la ONU le mantenga el embargo de armas por cinco años más, así como las restricciones a los misiles balísticos durante ocho años.

En las calles de Teherán, los iraníes sonaron las bocinas de sus autos y celebraron en la principal plaza de la ciudad. El presidente Hasán Ruhani dijo que había comenzado un “nuevo capítulo” en las relaciones de su nación con el mundo, aunque rechazó que el país hubiera buscado alguna vez desarrollar un arma atómica.

Aunque Estados Unidos fue socio con Gran Bretaña, Francia, Alemania,