Cowell con los dias contados en "Idol"

Por NEKESA MUMBI MOODY

NUEVA YORK (AP) — Simon Cowell tiene los días contados y Paula Abdul ya se ha ido. Esta temporada podría representar el fin de una era para el programa más popular de Estados Unidos: “American Idol”.

Y si de hacer honor a su título se trata — crear una superestrella que capture la imaginación de millones — el poder de “Idol” ha estado decayendo. Aunque produjo sensaciones mutliplatino en sus inicios, empezando por Kelly Clarkson y terminando con Carrie Underwood, los ganadores o finalistas recientes no han disfrutado de éxitos similares.

Kris Allen, el campeón del año pasado, ha vendido unas 200.000 copias de su álbum. Y mientras el primer finalista, Adam Lambert, demostró ser más popular y controvertido, su debut tampoco estuvo mucho tiempo en las listas de popularidad.

“Cuando uno empieza a pensar en ‘American Idol’ como un lugar que alimenta el negocio de la música, no es tanto como la gente cree. Ha decaído”, dijo Howard Benson, quien produjo los primeros dos CDs de la exitosa banda del finalista Chris Daughtry, Daughtry.

Por supuesto, “decaído” es relativo si hablamos de un programa que ha sido el líder indiscutible de la TV desde que apareció en el 2003, generando millones de ventas de discos, múltiples laureados Grammy e incluso una ganadora de Oscar, Jennifer Hudson. Hasta los aspirantes no clasificados de “Idol” han logrado tener carreras musicales tras participar en la competencia de Fox.

“Sigue siendo el programa más visto de la TV — algunos años incluso más que los Premios de la Academia y los Grammy”, dijo Ann Donahue, editora senior de la revista Billboard. “Pero llevar a la gente que ve el programa a comprar discos es difícil”.

Como el resto de la industria musical, “Idol” enfrenta un caída en las ventas de música. Aun así, la baja en ventas y la falta de emoción por los ganadores de “Idol” es reveladora. Cuando Clarkson se convirtió en la primera ganadora de la competencia en 2003, su álbum “Thankful” debutó de No. 1 y vendió 297.000 copias, con éxitos como “A Moment Like This” y “Miss Independent”. Llegó a vender 2,7 millones de copias, según Nielsen SoundScan.

Al año siguiente, el campeón Ruben Studdard vendió 1,8 millones de discos y tuvo el éxito “Sorry 2004”. A Clay Aiken, primer finalista de esa temporada, le fue aún mejor: vendió 2,7 millones del CD “Measure of a Man”.

Después vino Fantasia, cuyo disco “Free Yourself” también vendió 1,8 millones de copias. Underwood se estableció como la ganadora más exitosa al vender casi 7 millones de copias de su disco de música country, que incluyó éxitos pop como “Jesus Take the Wheel” y “Before He Cheats”.

Sin embargo, el siguiente ganador, Taylor Hicks, fue una gran decepción al vender sólo 700.000 copias de su CD. Jordin Sparks le siguió con un certificado de platino y David Cook también se apuntó un platino, pero sus canciones no generaron ningún gran éxito.

Este año, el campeón de “Idol” Kris Allen lanzó su primer disco homónimo sin bombos ni platillos. No debutó en el tope de la popularidad; ahora ocupa la casilla No. 91 de la lista Hot 200 de Billboard.

En una entrevista reciente, Underwood dijo que ganar “American Idol” no garantiza nada, aun cuando uno tiene un primer disco exitoso.

“Veo a las personas que vinieron antes de mí, y de muchos no he oído nada en mucho tiempo. Y no creo que sea desde que yo gané”, añadió. “Creo que uno también necesita tener mucha suerte. El hecho de que la gente vote por uno no significa que irá a comprar tu álbum, especialmente ahora”.

En una entrevista con Fox News, Cowell dijo que decidió dejar el programa después de esta temporada por “no creer que uno deba hacer lo mismo una y otra vez”.

“Espero y creo que seguirá siendo el programa No. 1 en Estados Unidos”, dijo, argumentando que los cambios son positivos porque “no se puede tener a la misma gente todo el tiempo, se vuelve aburrido”.

El año pasado “Idol” sumó a una cuarta jueza, Kara DioGuardi, al panel original integrado por Cowell, Randy Jackson y Abdul. El año pasado Abdul anunció su partida; la reemplaza la comediante Ellen DeGeneres.

Donahue dijo que concursantes como Allen tuvieron buenas ventas digitales y que ese sería el mejor modo de medir su éxito porque el programa es más popular entre personas de 18 a 49 años, que tienden a comprar más sencillos que CDs.

Fantasia, cuyo disco alcanzó oro y quien disfrutó de éxito en Broadway, sostuvo que el éxito o el fracaso dependen del ganador, no de “American Idol”.

“Está en nuestras manos. Tenemos que luchar también”, afirmó. “Tenemos que asegurarnos de que ofrecemos buena música y vendernos bien”.