<B>LRN </B>

Cualquier liga profesional en el deporte mundial pierde algo de interés al final si sus equipos de mayor tradición se quedan por el camino.

Y ese será el caso de la NBA en el 2011, luego que los Celtics de Boston y los Lakers de Los Angeles fueron eliminados en las semifinales de conferencia.

El atractivo ahora se centra en Miami, donde el Heat cumplió su misión de volverse un equipo de calibre al traer al mejor jugador de la liga, Lebron James, a reforzar un cuadro que ya contaba con una estrella de primer nivel, Dwayne Wade.

Aplastaron a los Lakers

DALLAS (AP) — Phil Jackson salió de la cancha por última vez con una sonrisa breve, mientras recibía felicitaciones y apretones de mano como lo hizo muchas veces al final de una serie de postemporada, en una carrera de éxitos sin par.

Sin embargo, el entrenador más exitoso de la historia de la NBA –que se retiró el domingo tras ganar 11 títulos– se fue como nunca antes, con su equipo barrido en una serie de playoffs.

Jason Terry y los Mavericks de Dallas se encargaron de acelerar su retiro y el inicio de las vacaciones de los bicampeones Lakers al derrotarlos 122-86 para ganar su serie de semifinales de la Conferencia Oeste por 4-0.

Tras dos finales ajustados y un partido que fue relativamente peleado, los Mavericks convirtieron éste en una paliza desde el segundo cuarto.

Terry encabezó el bombardeo de Dallas, que encestó una andanada de triples para ponerse arriba por 24 puntos tras la primera mitad. Cuando el escolta anotó dos tiros de tres seguidos al inicio del tercer cuarto, Los Angeles se dio cuenta que no había remontada posible, ni en el partido ni en la serie.

Miami eliminó a Boston

Para LeBron James, el quinto partido de la serie de playoffs la temporada pasada ante Boston fue horrible.

Un año más tarde, el quinto partido fue glorioso. Ahora, tanto él como el Heat de Miami están a medio camino de conquistar un campeonato de la NBA y finalmente hallaron una manera de liquidar a los Celtics.

No solamente el Heat sorprendió los Celtics, sino que oficialmente los superó y va a la final de la Conferencia del Este.

Dominando al equipo al que no pudieron derrotar por tanto tiempo con una ofensiva de 16-0 en el último tramo del encuentro, Dwyane Wade anotó 34 puntos.

LeBron James le dio la ventaja definitiva al Heat con un triple a 2:10 minutos del final en una actuación de 33 unidades, y Miami doblegó el miércoles 97-87 a Boston para ganar la serie de semifinales del Este en cinco partidos.

Cuando restaban 40,4 segundos en el reloj, James agregó un triple que selló el partido –o mejor dicho, que selló la serie; Un robo y una clavada a dos manos seis segundos después, seguidos de un balón perdido por los Celtics, pusieron en marcha la fiesta de los aficionados del Heat.

James se puso de rodillas para orar por varios segundos, y luego corrió para fundirse con Wade en un prolongado abrazo mientras los espectadores festejaban con exclamaciones ensordecedoras.