Jorge Rivera
NuestroNoroeste.com
Dos jugadas con balón detenido ejecutadas con precisión por David Beckham encontraron las cabezas de Edson Buddle y Omar González, y con ello bastó para que el Galaxy de Los Angeles venciera de nuevo al Sounders FC, y avanzara a las semifinales por la Copa MLS.
El equipo de Seattle fue nuevamente inefectivo frente a la cerrada defensa del Galaxy, y el portero Donovan Ricketts, nombrado esta semana el mejor de la liga en el 2010, volvió a negar a Sounders opciones que pudieron cambiar el curso de un partido de cierto modo similar al de ida, la semana pasada.
“Jugamos mal en el primer tiempo, nos metimos en problemas y nos hicieron dos goles en pelota quieta” dijo el entrenador de Sounders después del partido, “en el segundo tiempo mostramos más carácter y tuvimos opciones, pero las opciones no cuentan, solo los goles”, sentenció.
La derrota cierra la temporada 2010 para Sounders, con resultados muy similares a la del año anterior, eliminación en primera ronda de la liguilla MLS, y campeonato en la Copa de los Estados Unidos.
El Partido
Frente a un ambiente de liguilla, con estadio completamente lleno y cantarín, los dos equipos saltaron a la cancha con prácticamente todos sus titulares; Sounders, sin embargo, debió dejar en el banco al defensa central Jeff Parke, lesionado la semana pasada, reemplazado por Tyrone Marshall.
La anticipación permanente del internacional Eddie Lewis sobre Sanna Nyassi, y de Juninho sobre Steve Zakuani, cerró desde muy temprano la salida rápida de Sounders desde los costados, y obligó a los delanteros del verde radiante a jugar de espaldas frente a una línea defensiva rápida y fuerte.
Galaxy, en cambio, encontró un poco más de espacio, gracias a la precisión de Beckham por derecha y Donovan por izquierda; este último generó el primer peligro a los cinco minutos, cuando un centro suyo encontró al peligroso Edson Buddle, y este tocó al centro para Mike Magee, que estuvo cerca de anotar, pero el balón fue rechazado al tiro de esquina.
El primer centro de Beckham, tras esa jugada, fue rematado a quemarropa por Omar González, pero fue al cuerpo de Keller; el segundo, siete minutos después, se resbaló entre los centrales de Sounders pero no encontró jugadores de uniforme blanco.
Galaxy tenía precisión en el dominio del balón y Sounders no, sus rechazos caían una y otra vez en jugadores del contrario, que como consecuencia creaba más opciones.
El primer gol cayó a los 18 minutos, luego de un avance de Donovan y un centro que Ianni rechazó al corner; el millonario jugador inglés cobró con precisión y el balón, que pasó a González por centímetros, encontró a Buddle a sus espaldas, quien de remate preciso venció a Keller.
Sounders no ofreció una reacción contundente, sus avances normalmente se quebraban en el tercer o cuarto toque, antes de crear real peligro.
A los 26 minutos nuevamente Donovan se desmarcó por izquierda, le escondió el balón a Nyassi y el africano lo enganchó con falta; Beckham cobró con curva y Omar Gonzalez anticipó a Ianni y a Nkufo para prácticamente “fusilar” de cabeza al portero de Sounders; 2-0.
Galaxy ganaba con justicia, Sounders no creaba mayor peligro, apenas un remate de Alonso a los 33, que fue manoteado por Ricketts, y uno mucho más suave de Nyassi a los 40, contaron en la estadística como disparos a puerta.
Segundo tiempo
Sigi Schmid envió a Alvaro Fernández en reemplazo de Nyassi tras el intermedio, es decir, mucho antes que de costumbre; con el marcador en contra, el uruguayo entró a buscar la puerta del Galaxy con intensidad, y a los 3 minutos chocó con el arquero Ricketts cuando se barrió buscando el gol.
Del otro lado de la cancha Beckham siguió causando problema, y a los 9 le escondió el balón a Leo Gonzalez cerca de la raya de meta, causando una falta un poco descontrolada del “Tico”.
El ataque de Sounders no parecía agrupado, solo Montero con un par de opciones a los 11 y 13 parecía realmente acercarse al arco, y se veía solo, con Zakuani y Nkufo retrazados y podría decirse que lentos.
Schmid continuó buscando más ataque sacando a Nate Sturgis a los 18 minutos para dar ingreso a Mike Fucito
El agrupamiento de atacantes pareció funcionar a los 21, cuando Fucito y Montero se combinaron de primera hacia el centro y dejaron solo a Zakuani a un costado; el portero detuvo su remate.
Con el ingreso de Jaqua por Ianni el verde pasó a jugar 3-1-3-3, retrazando definitivamente a Montero en busca de creación real en media cancha.
Pero, la verdad, mientras más apilaba Sounders gente, de mitad hacia arriba, más se notaba la propiedad con que David Beckham transitaba toda la cancha, no solo la mitad contraria, no solo un costado; el inglés parecía en todas partes.
A Sounders le tomó 115 minutos de tiempo reglamentario, sumando los dos partidos de la serie, pero finalmente lograron vencer la resistencia de Donovan Ricketts a los 40, cuando Jaqua tocó a Zakuani, quien eludió una defensa ya medio perezosa, y remató con rabia cerca al cuerpo del jamaiquino para marcar el descuento.
Seattle realmente nunca estuvo cerca de igualar la serie; el Galaxy volvió a imponer su estilo de juego y adelantó a Sounders con la calidad de los servicios de Beckham y la precisión de los remates de sus hombres altos.
Sounders está fuera, Galaxy se mide al Dallas la próxima semana, por un cupo a la final de la Copa MLS.
“Nos falta crecer un poco” dijo Sigi Schmid, “Como franquicia hemos participado en cinco torneos en dos años, y hemos ganado dos campeonatos, yo pienso que eso es bueno”, concluyó.