Jorge Rivera
La Raza del Noroeste
La novela del paso de David Beckham a Italia se encuentra ya en sus capítulos finales, y quizás para bien de todos. Beckham ya ha sido claro que peleará por quedarse en el Milán y hacerle pases a Kaká y a Ronaldinho, lo que lo hará verse muy bien. La pregunta que realmente importa, en mi opinión, es: ¿Valió la pena traer a Beckham a la MLS? La respuesta, como en muchos casos, es Sí, y No. Me explico. Si, Beckham llamó la atención del mundo sobre esta joven liga, y sobre su deseo de crecer y traer un espectáculo deportivo real, y de alto nivel. El inglés también creó un efecto de futuro, al inculcar en muchos jóvenes el interés en el futbol profesional, y los frutos solo se verán en unos años. Pero no, no valió la pena traerlo, si de mejorar el nivel se trata. Tres datos para ilustrar el punto, durante su tiempo en MLS Beckham participó en 30 juegos, anotó 5 goles y asistió en 12. En el mismo tiempo Cuauhtémoc Blanco participó en 41 juegos, anotó 11 goles y asistió en 18. Los números no mienten, el aporte del Mexicano ha sido mayor, pero no es solo en números. El equipo que representa Blanco ha mejorado desde su llegada, llegó a la final de su conferencia el año pasado, y a post temporada el anterior. Beckham por su parte, nada, el equipo sigue siendo de los peores en la liga. Pero la culpa no es de Beckham. La MLS no mejoró con Beckham porque los directivos del Galaxy piensan más en mercadeo que en futbol, así de simple. Mientras se inventan torneos de tercera, por todo el mundo, para promover al Inglés y traer unos dólares, no muchos realmente, el equipo de revuelve año tras año en mediocridad. Ojala aprendan de esta, y al Ingles, que es buen futbolista, que le vaya bien. Lo merece. JRP