Jorge Rivera
NuestroNoroeste.com
Existen dos razones importantes que no tienen que ver con lo que pasa en una cancha durante 90 minutos, pero que hacen del fútbol un fenómeno de relevancia e impacto mundial:
Una, el fútbol ha existido por tanto tiempo ya, que es uno de los mejores descriptores de la historia de la sociedad, y de cómo se ha venido formando en los últimos 100, casi ya 120 años.
Dos, el fútbol ha venido acumulando narraciones y leyendas casi mitológicas sobre los personajes que han hecho historia en el deporte, a nivel mundial, nacional y de clubes.
Por eso, la visita del Boca Juniors de Buenos Aires es histórica para nosotros, los Latinos que vivimos en el área de Seattle.
Durante los próximos 10 días presentaremos notas cortas, para ponerlo a usted, amigo lector, “en ambiente”, con la visita de los Xeneixes al noroeste.
Capítulo I
La Boca del Riachuelo
Boca Juniors es, como su nombre lo indica, el Club de Fútbol que nació, en 1905, para representar al vecindario que lleva su nombre en la capital Argentina.
Pero ¿qué es la Boca?
Según la oficina de turismo de la Ciudad de Buenos Aires, la Boca se llamó a un pequeño barrio de marineros que creció donde un pequeño rio, el Riachuelo, desembocaba en la enorme boca del Rio de la Plata que dá al mar; el sitio fué por mucho tiempo, desde fines del siglo XIX, un puerto importante, al que llegaban inmigrantes principalmente de Italia, pero también de Grecia, España, y países Anglos.
Entre los italianos la colonia más fuerte venía de otro puerto, Génova, y según los archivos, la palabra Xeneize significa Genovés.