Efraín Palomino Morales

Corresponsal de La Raza del Noroeste

La calificación del Tri a los Juegos Olímpicos de Londres 2012 dejó el ambiente cascarero en nuestro rancho como agua para chocolate y en la cantina La Cáscara de Seattle todos la fiesta traían y es que los clásicos de la jornada a nadie aburrían.

“¡Por la lejana sultana, va cabalgando el Tuca, vaga solito en la cancha y va esperando a Vucetich! ¡Lleva en su pecho a los Tigres, va con su alma reforzada, quisiera perder la vida antes que perder con Rayados!” cantó don Pedro, en honor al único Puma exitoso del momento.

“No sea villamelón, don Peter –dijo el mesero, quien le sirvió un espumosa más y continuó- No se cuelgue santitos que no son de su parroquia. Y para que el tiro esté parejo, hay le va una canción en honor a mis Rayados que tanto quiero. ¡Estoy en el rincón de una cantina, oyendo una canción que yo pedí! ¡Me están sirviendo ahorita mi tequila, ya va mi pensamiento rumbo a Tigres! ¡Me invitas Tuca una copa o te la invito yo, tenemos que brindar por nuestra rivalidad! ¡Quién no sabe en esta liga, la pasión tan conocida que nos apoya a los Rayados! ¡Quién no llega a la cantina, exigiendo su tequila y exigiendo un gol del Chupete! ¡Me están sirviendo la del estribo, y ya va mi pensamiento a los tristes Tigres!”, cantó el cantinero con el orgullo de ser más regio que el mismísimo cabrito.

De pronto, la abuela Chucha a la cantina llegó y, como buena tapatía, una botella de tequila pidió y una canción para sus Chivas dedicó. “¡Yo sé bien que de la Liguilla casi estoy afuera, pero el día que en un clásico me raje sé que tendrás que llorar! ¡Dirás que en la fiesta grande no nos quisiste, pero al ganarle a las gallinas vas a estar muy triste, y así te vas a quedar! ¡Con Liguilla y sin Liguilla, mi Rebaño hace lo que quiere y su palabra contra el América es la ley! ¡No tiene al Chícharo ni a Cruyff, ni a Vergara que lo comprenda, pero mi Rebaño en el clásico sigue siendo el rey!”, cantó la doñita con harta alegría.

Y como si algo faltara, el Chido One apareció y con norteño a un lado, a sus Águilas les cantó. “¡Porqué voy a llorar cuando a las Chivas les gane, si alguna vez tenía que suceder! ¡Este cariño ardiente por mis Águilas, ni con los jugos de Vergara se puede apagar! ¡Porque voy a llorar cuando al Rebaño goleen, y digan que ya no pueden más! ¡Es cierto que me duele humillarlas, pero como otras veces ya se me pasará! ¡Porqué voy a llorar por ganar el clásico, si ni parientes somos, lo mismo a mi me da!”, cantó el orgullo chilango.

La abuela Chucha, para sorpresa de todos, en vez de pelea a su nieto invitó a sentarse, y los cuatro brindaron como en clásica borrachera de cantina, esperando con ansias que el silbatazo sonara.

Chanflazo, calcetinazo y desempance

El chanflazo de esta semana es para los “buena gentes” de la Conmebol y es que, al parecer, les cambió de un día para otra la percepción que tenían de la Concacaf. Hay tienen que los altos mandos de la cáscara sudamericana ya planean con los “prietitos en el arroz” continental (los de la Concacaf, pues) la organización de la Copa América 2016, en la que se plantea tener seis equipos por confederación. ¡Ya era hora! ¿Cómo pueden llamar a un torneo continental si no se juntan con la chusma? Ojalá y este cambio de actitud de los sudamericanos no haya sido sólo porque nos vino a visitar el Papa.

El calcetinazo es para Ángel Reyna y es que, aunque es muy valido que festeje sus goles como se le hinche la gana, también es cierto que debe haber un respeto para la institución que te dio la oportunidad de debutar. ¿O ustedes creen que festejar a la “Cuau” el gol con el que Monterrey derrotó al América les agradó mucho en el nido? Hay que ver ejemplos de otros jugadores que no festejan los goles que anotan a sus ex equipos. ¡Eso dignifica al deportista, caray! En fin, nadie es monedita de oro y con respecto a Reyna el angelito solo lo trae en el nombre. ¿O no Mosqueda, o mejor dicho, capitán de agua?

Y el desempance es para el único mexicano que lo puedes odiar o amar, pero nunca dejarlo de admirar (y conste que no hablo de Chente Fernández). Hay tienen que Hugo Sánchez sonó para dirigir nada menos que en Colombia y es que la prensa cafetera informó esta semana que el pentapichichi es una alternativa para dirigir a Millonarios de Bogotá, equipo que está sumido en una grave crisis de resultados. Días atrás también se especuló que Hugol podría llegar al River Plate de Argentina, aunque al final se desmintió. Como diría el Chavo, será el sereno pero mientras Huguito siga sonando es porque ritmo aún le sobra.

¡Nos chutamos la próxima semana!

Comentarios: por.miraza@hotmail.com