Se acerca el final de la semana y es tiempo, para mí, de escribir en este “Blog”.
El tema de moda en los medios de fútbol de este país es Rafa Márquez, por supuesto, la implicación de su llegada, lo que contribuye a la liga, lo que contribuye al Red Bull, que si los mexicanos irán a verlo, que si los latinos irán a verlo.
Y bueno, yo tengo mi opinión sobre el tema, la voy a escribir.
Me siento “a verme un partidito” mientras tanto, para distraerme.
Resulta que me pongo a ver Columbus contra Philadelphia en ESPN; okay, eso me sirve, pienso.
Pero me distrae mucho.
Primero, en un saque de puerta, me doy cuenta que el estadio esta lleno, casi completamente, apenas una pocas series de bancas vacías; y que hay un ruido casi extraño, un ruido como de… ¡partido de fútbol!
Es el nuevo estadio de Filadelfia, lleno con un montón de gente que grita; colorido, sudoroso.
En serio, me recuerda el futbol, cuando lo veía en mi tierra.
A los tres minutos de que empiezo a verlo, hay un tiro libre; cobra Schelotto, un globito increíble, por encima de la defensa de Philly, y preciso y letal, llega de cabeza y mete el gol, un rubio que me cae repesado.
Es el #32, se llama Steven Lenhart y, me guste o no, me parece una de las promesas grandes de este fútbol, tiene 23 años, es un 9 natural, grande, fuerte, y, lo que es extraño para un “nativo” de este país, con instinto…
Fué un golazo.
Ok, vamos a escribir de Rafa
Un momento, Filadelfia se vino como una tromba, un tiro libre cruzado, “caliente”, Seb Letoux toma el rebote, encara al melenudo Frankie Hedjuk, le busca el pie, cae, ¡Penalty!
El jugador que descartó Sounders en Noviembre, anota su gol número 8, más que Montero, más que Zakuani.
Está “Sabroso” el picadito, la cáscara, como se diga….
Rafael Márquez llegó esta semana a la MLS, declaró que no viene de vacaciones, los analistas dicen, decimos, de cierto modo, que su tamaño, su fuerza y su manejo del balón le van a dar al Red Bull un control tremendo en el medio campo.
No es desecho, la mayoría de los equipos en la liga mexicana morirían por recibirlo a la salida del Barza.
Pero Rafa, la verdad sea dicha, es una de varias historias actuales de la MLS, también está Nery Castillo, que llega a “matar o morir”, en su aspiración de ser jugador de primera línea a sus 24 años.
Esta el flaco Fernández, que ya empezó a mostrar su clase mundialista en Sounders.
Esta el estadio de Filadelfia lleno, ruidoso y con LeToux; está la batalla de Sounders, un equipo de año y medio de vida, en El Salvador.
“Algo está pasando en este barrio” dicen los viejos, aquí se aplica: algo está pasando en este país.
La MLS ya no es una liga de mentiritas, ya no es un montón de “troncos” jugando para un único talento, de 35 años.
Algo está pasando en este país.
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