Efraín Palomino Morales

Corresponsal de La Raza del Noroeste

Esta semana en el pueblo de San Angustias varios se reunieron en la cantina la Cáscara de Seattle para comentar el “bautizo” del Chepo de la Torre.

“Al mal paso, darle prisa”, dijo Don Pedro con total desconfianza, mientras abría la sección deportiva de La Raza del Noroeste. “Más bien dirá: al mal tiempo, buena cara”, le respondió la abuela Chucha, quien traía bien puesta la playera del Tri. “A mí no me hacen tarugo los de la Femexfut, el Chepo correrá con la misma suerte que sus antecesores si no se faja los pantalones y exige partidos para hombres y no para payasos como el que acaba de jugar, acuérdese Doña Chucha: el que anda con lobos a aullar se enseña”.

“El Chepo escogió bien a su cuerpo técnico llamando a gallos más que calados como Luis Fernando Tena y el “Yayo” de la Torre para asesorarlo, recuerde Don Pedro: al que a buen árbol se arrima, buena sombra lo cobija”, dijo el cantinero, sirviendo la primera ronda de la noche. “En el modo de agarrar el taco se conoce al tragón, sólo basta con ver los goles que le regaló Bosnia a nuestros ratones verdes para ver que ni buscándole le encontraremos las mangas al chaleco del Tri”, sentenció Don Pedro, empinándose su tarro con cerveza. “Será el sereno, como diría la Chimoltrufia, pero ahora que se inicia un nuevo proceso en la selección nacional es cuando chile verde le ha de dar sabor al caldo, y aunque hayan sido goles de a “pechito” contra los gringos europeos, las penas que nuestros verdes nos dejaron desde Sudáfrica 2010 con pan son menos o ¿a quién de los presentes le dan pan que llore?”, preguntó sabiamente el hijo del cantinero, mientras destapaba el tequila.

De repente la puerta se abrió y el Chido One con mariachi a un lado se entonó. “¡Cuando quieras tú, divertirte más y festejar sin fin! ¡Yo sé de un lugar, yo te llevaré y disfrutarás de un partido que nunca olvidarás! ¡¿Quieren triunfar esta noche?!¡Vamos a Coapa Coapa, Coapa Coapa, Coapa Coapa, vamos a Coapa Coapa, a Coapa con el América a triunfar!”, cantó alegremente el chilango, aún con la parranda de tres victorias encima y con la intención de una cuarta. Doña Chucha, quien era abuela del orgulloso americanista, lo agarró de las orejas y con tremendos jalones se lo llevó, mientras para sí se decía: “si no tiene la culpa el indio, sino el que lo hace su nieto”.

Chanflazo, calcetinazo y desempance

El chanflazo es para el único Vasco que le entra sin pudor alguno a los tacos de tripa y al tepache con piquete. Javier Aguirre llegó al Zaragoza para revivir a un muerto que ya velaban en España, sin embargo y a pesar de un inicio poco alentador, el Vasco ha logrado inyectar orgullo a su equipo, tan es así que ya suman cuatro partidos sin perder, alejándose del fondo de la tabla y del hoyo en el que descansarían en paz los Maños. ¡Vasco, llévate al Güero Real y enséñale a sacar las papas del horno!

El calcetinazo es para la conciencia de los árbitros del fútbol mexicano que la tienen más negra que Jelipe Calderón después de salir de parranda con sus “diputables”. Hay tienen que son dos goles legítimos los que le han anulado a los mal aventurados necaxistas. Estos dos errores ponen con más de un pie en el descenso a los necaxistas (hagan de cuenta que como chivito en precipicio). Es verdad que los Rayos solitos se han puesto la soga al cuello pero recuerden que tanto peca el que mata a la vaca como el que le agarra la pata.

Y el desempance es para una selección mexicana que lejos de echar pata con una pelota para darnos puras frustraciones mejor opta por agarrar a garrotazos a sus rivales y ser campeones. Así es mi raza, sé que este espacio es pambolero pero vaya que se merecen una mención los Yaquis de Ciudad Obregón, equipo de beisbol mexicano que ganó esta semana la Serie del Caribe 2011 de Puerto Rico. Este es el sexto título que gana una ocena mexicana en el Caribe y es digno de abrir el tequila y gritar ¡Viva México!

¡Nos chutamos la próxima semana!

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