Alejandra Benítez

Agencia Reforma

Las dos ocasiones que América dejó fuera a Rayados en una Semifinal fue campeón.

El conjunto azulcrema tiene un historial interesante en sus enfrenamientos con el Monterrey, equipo que llegó a esta instancia como líder de la competencia. En tres ocasiones se han visto las caras en la antesala de la Final, en el Clausura 2012, que fue el primer torneo de Miguel Herrera al frente de las Águilas, y los regios los echaron sin contemplaciones. Pero luego vinieron los duelos del Clausura 2013 y del Apertura 2014, donde la historia cambió y ahora fue el cuadro de Coapa el que los eliminó. A pesar de que no lo han admitido abiertamente, para nadie es un secreto que Antonio Mohamed vivirá este encuentro con una mezcla de sentimientos, porque se medirá al equipo que hizo campeón en el 2014, pero ese título no lo disfrutó al máximo por los roces y diferencias que ya tenía con los directivos azulcremas. El “Turco” marginó a Paul Aguilar de la Final argumentando una fuerte indisciplina del jugador, pidió su cabeza y la dirigencia no lo apoyó. Pero además el técnico argentino también había tenido varios desencuentros por tomarse permisos especiales y salir de las concentraciones, entre otros. Incluso ya tenían a su relevo cuando levantó la Copa. En el último encuentro de la Fase Regular, donde América y Monterrey empataron 3-3, en la conferencia de prensa, Mohamed dejó ver que esa herida sigue abierta y no ha sanado. Ambos conjuntos llegan sin bajas, listos para poner a sus mejores hombres. Y en esta ocasión, las Águilas deben apelar a su condición de locales, un factor que apenas pudieron amalgamar este torneo, pues bajo el mando de Ignacio Ambriz les costaba imponer condiciones en el Azteca.