Alberto Bortoni
Agencia Reforma
Las capacidades de los deportivo-utilitario de Toyota como vehículos todo terreno ha sido probada por ya muchos años.
Uno de los favoritos de muchos en el segmento de SUV ha sido la 4Runner y para el 2014 Toyota le ha dado una notoria rediseñada.
El objetivo de la marca era darle una apariencia más agresiva y sin duda lo han logrado. Quizá no será del agrado de todos, pero las líneas anguladas, una parrilla más musculosa y la gran toma de aire en el frente sin duda hacen que se logre el cometido.
Uno de los detalles que se le ha agregado es una placa metálica en la fascia delantera; un pequeño indicio de sus intenciones como vehículo 4×4.
Mecánicamente todas las 4Runner contarán con el motor V6 de 4.0 litros de desplazamiento. El motor cuenta con 260 caballos de potencia y 278 lb-pie de torque. Quizá en comparación a un crossover moderno la 4Runner no sea la opción más eficiente pero no tiene malos rendimientos considerando que se trata de una arquitectura de vehículo utilitario tipo “body on frame”.
Las versiones de la 4Runner incluyen una de tracción sencilla, una 4×4 de tiempo parcial y una 4×4 con tracción integral todo el tiempo. Esta última incluye la modalidad de bloqueo del diferencial central.
La 4Runner no es un crossover que busca manejarse como un auto, es un SUV con todas las letras y para quienes desean contar con capacidades reales fuera del pavimento.
Es apropiado en todo tipo de terrenos y de acuerdo con Toyota, ahora con más comodidad y refinamiento en el interior.
En este segmento son pocos los modelos que se han mantenido fieles a su concepto original y hay que reconocer que la 4Runner lo ha hecho exitosamente por casi 30 años.