Alberto Bortoni
Agencia Reforma
Entre los hatchbacks deportivos el Golf tiene un lugar especial. Para muchos es el mejor deportivo de su segmento y por sus niveles de equipamiento y precios ese segmento es muy variado. Ahora, Volkswagen ha mostrado la versión más extrema del Golf, una versión diseñada para pista pero que cubre con los requisitos de regulación del TCR, el Touring Car Racer International Series (TCR).
TCR es una categoría nueva y muy orientada a la competencia con equipos privados. Para ellos Volkswagen ha diseñado este nuevo Golf, que si bien en su estética es evidente que se trata del hatchback de la marca alemana, es también evidente que no es un modelo de producción normal.
En la parte estética hay muchos indicadores importantes. En primer lugar se trata de un vehículo bastante más ancho que el auto de producción. El auto tiene 40 centímetros más de anchura en sus ejes, por lo que hubo que modificar ampliamente su carrocería para acoger a los neumáticos.
Mecánicamente este Golf cuenta con el motor de cuatro cilindros y 2 litros de desplazamiento. Este es la versión más potente, tomada del Golf R, pero modificado para generar 330 caballos de fuerza y cerca de 302 lb-pie de torque. Volkswagen utiliza la transmisión DSG, con paletas montadas en la parte trasera del volante y obviamente calibrada para una rápida acción. Volkswagen motorsport no estuvo solo en la adecuación del Golf; el equipo de Seat, que tiene una amplia experiencia con el Leon Cup Racer estuvo también involucrado.
Volkswagen ha creado a este auto como un modelo para competencia en pista. Este es un modelo de tracción delantera, a diferencia del Golf R que cuenta con tracción integral en las cuatro ruedas. to con el equipo de ingeniería de Liqui Moly.