Víctor Alemán y Jorge Bonilla
Agencia Reforma
MÉXICO, DF .- La conocida escalada en precios de combustibles y crecientes exigencias e incentivos ambientales en los principales mercados automotrices, han originado un incremento en la producción y oferta de modelos subcompactos en la industria automotriz.
Debido a su cercanía con uno de los mercados automotrices más grandes del mundo, aunado a la calidad de mano de obra, México es uno de los países más beneficiados con la nueva tendencia.
Modelos como el Ford Fiesta, Chevrolet Aveo, Nissan Tiida y recientemente un sedán compacto de Volkswagen (probablemente el Polo sedán), son algunos de los modelos de pequeñas dimensiones y consumo eficiente que produce y producirá México para su exportación.
Los que entran
a producción
La llegada del Ford Fiesta se espera para el 2010. Probablemente cuente con el motor 4 cilindros de 1.6 litros de desplazamiento, con un rendimiento aproximado a los 17 kilómetros por litro; existe otro motor más eficiente de 97 caballos que estira la cifra a los 17.5 kilómetros por litro.
Su centro de producción será la planta Cuautitlán de Ford en el Estado de México.
Volkswagen producirá en Puebla un nuevo sedán compacto, que muy probablemente se base en la nueva generación del Polo, cuyas ventas acaban de iniciar en Europa.
Este proyecto representa una inversión de mil millones de dólares en la planta, donde también producen al Bora, Jetta y Beetle. Se espera que el nuevo modelo salga de las líneas mexicanas de producción para abril próximo.
General Motors tiene en San Luis Potosí la planta que produce uno de los modelos más eficientes dentro de su gama, el Aveo.
En el mercado estadounidense actualmente quien cambie su vehículo de 6 u 8 cilindros por uno de estos, recibe un bono de hasta 4 mil 500 dólares.
En Aguascalientes, Nissan produce el no tan compacto Tiida (que en Estados Unidos se ofrece como Versa), en versiones hatchback así como sedán.
El modelo utiliza la plataforma B de la Alianza Renault-Nissan, sobre la cual está basado también el Renault Euro Clio y el nuevo Nissan Cube.
Debido a lo anterior, no sería descabellado que la Alianza franco-japonesa considere producir en México alguno de los dos modelos.
Por ahora, el Nissan Cube se ofrece en Estados Unidos importado de Japón, mientras que el Euro Clio ya no se ofrece en México por su elevado costo al ser importado de Europa.
Otro de los modelos que podrían ser producidos en México es el Mazda2. El más pequeño de los modelos del “zoom zoom”, estrenó la plataforma que utiliza ahora el nuevo Fiesta, y considerando que el Ford se fabricará en la planta de Cuautitlán, podría resultar una decisión eficiente producirlo en México para exportarlo a Estados Unidos y otros mercados de la región.
En el mediano plazo, allá por el 2011, otros de los productos que podrían fabricarse en México serían resultado de la asociación de Chrysler y Fiat.
Uno de los primeros vehículos sería el pequeño Fiat 500, el cual podría producirse en la planta Toluca de Chrysler para su exportación a Estados Unidos y otros mercados. Otro proyecto interesante con los italianos sería un vehículo subcompacto basado en el Fiat Panda 4×4 para la marca aventurera Jeep. Y claro, no se puede descartar un sedán compacto basado en el Fiat Línea para comercializarse en Estados Unidos bajo las marcas Chrysler o Dodge.