Francisco Márquez
Agencia Reforma
La nueva generación del superdeportivo de la casa de Ingolstadt ha dado un paso evolutivo importante. Desde su lanzamiento, el Audi R8 había logrado crear pasiones, gracias a su diseño y prestaciones.
Ahora, la firma decidió actualizarlo en el amplio sentido de la palabra, con un diseño que mantuviera la esencia a la vez que incorporara el nuevo lenguaje de diseño. La premisa ha sido lograda, mejorando sustancialmente al deportivo.
La aplicación de nuevas tecnologías en la construcción del vehículo, es un paso trascendental para obtener mejoras en rendimiento. Gracias al uso de fibra de carbono reforzada con polímeros, estructura que se une al aluminio, un trabajo fundamental en la mejora del R8.
Es importante recordar que para mejorar autos de esta categoría, uno de los puntos importantes es la reducción del peso, una labor en la que el desarrollo de ingeniería y la aplicación de nuevos materiales son fundamentales. Audi R8 ha logrado reducir su peso en un 15 por ciento respecto a la generación anterior.
A su vez, también se ha logrado un incremento en la rigidez del 40 por ciento, otro paso importante para mejorar el desempeño de un vehículo, sobre todo tratándose de un deportivo.
La parrilla forma parte de la nueva identidad de marca, la cual ahora le proporciona una imagen más agresiva, a la vez que el diseño se ha estilizado en los laterales.
Los faros, forman parte de la innovación del vehículo, ya que cuenta con faros frontales en LED en tanto que de manera opcional se integran los faros láser, una tecnología que llama la atención sobre todo por las ventajas que ofrece al
Audi R8 tiene una longitud de 4.42 metros de largo, altura de 1.24 metros y anchura de 1.94 metros, con una distancia entre ejes de 2.65 metros.
El interior también fue diseñado centrado en la concepción de que al tratarse de un vehículo deportivo, los controles deben enfocarse al conductor. Tenemos un nuevo diseño de volante, el cual es complementado por los controles al más puro estilo de un vehículo de carreras.
La pantalla TFT de 12.3 pulgadas, que forma parte de la instrumentación, ha sido un enorme acierto de la firma alemana, el cual ya ha sido apreciado en el TT.