Por Erick González
Agencia Reforma
MONTERREY, NL – Bianca Sierra y Stephany Mayor, nuevas jugadoras de Tigres Femenil, fueron víctimas de homofobia y discriminación, lo que las orilló a huir del País rumbo a Islandia.
Luego de que ambas jugadoras anunciaran su compromiso el 24 de noviembre del 2018, pronto se convirtieron en el foco de críticas en redes sociales, pero también en el terreno de juego.
De acuerdo al diario The New York Times, las jugadoras de la Selección Mexicana Femenil fueron increpadas por su entonces técnico, Leonardo Cuéllar, por lo que tuvieron que marcharse lejos de casa.
Mayor compartió textualmente las palabras que les brindó Cuéllar en un entrenamiento del Tri.
“A mí no me importa si son novias o no, pero no las quiero ver ahí agarradas de la mano o haciendo desfiguros”, habría dicho el DT.
Para ello, encontraron en el Thor/KA, de la Liga islandesa, una nueva forma de vida sin prejuicios ni discriminación, un lugar en el que podrían trabajar tranquilas.
“Hay muchos tabúes en México para hablar de la sexualidad. Hay cosas que no se hablan, es algo yo creo cultural. Para mí fue fácil abrirme con Bianca porque ella desde el principio tenía sus ideas claras de lo que quería, eso me ayudó mucho”, dijo.
Así mismo, Sierra relató al diario estadounidense que encontró el amor en Mayor durante el Mundial de China, en 2015, mientras que ella jugaba en Washington, de la NWSL de Estados Unidos, y su pareja en la CDMX.
Ahora, la pareja continuará su carrera en Tigres, de la creciente Liga MX Femenil, donde seguramente esperarán un ambiente cómodo y seguro.