Acción y Reacción por Adriana Bataille
Consultora de Marketing y desarrollo de negocios
¿Cómo describiría la innovación si fuera un ser de carne y hueso?
“Innovación” podría ser un hombre o una mujer; indudablemente destacaría por su talento, por su chispa creativa y su ingenio, una persona con el carácter plantado para tomar las decisiones adecuadas aún en medio de la tormenta. “Innovación” sería una persona que observa el mundo con curiosidad y su astucia lo mantiene firme a pesar de los tropiezos. Es una persona pendiente de las nuevas tendencias, alguien al que no le da miedo experimentar, al que le gusta correr riesgos y aprender todo lo que sea necesario para alcanzar sus objetivos y distinguirse por su carácter y tenacidad entre la multitud.
La innovación existe, es real, y usted como emprendedor merece enfocarse en destacar los atributos de su negocio en el mercado.
Claro que habrá que pensarlo con calma, ya que mucho se habla acerca de la innovación en los negocios y las posibilidades que puede brindar al emprendedor el situarse un paso adelante de la competencia. Sin embargo, necesitamos que cada día haya más emprendedores hispanos que se tomen el tiempo para observar cuidadosamente su negocio y que lo miren con ojos de consumidor. Al analizar su emprendimiento como lo hacen los clientes, usted se volverá quisquilloso, exigente y evaluará concienzudamente el costo-beneficio de los productos o servicios que ofrece. Cuando mire profunda y cuidadosamente —como lo hace un consumidor—, las ideas se modificarán y tendrá una mayor apertura para detectar las áreas de oportunidad para innovar en su negocio e incluso descubrirá cómo corregir aquello de lo que no se había percatado antes.
Para un emprendedor curioso y audaz, “innovar” significa transformar una idea en una solución que agregue valor desde la perspectiva del consumidor. Un emprendedor debe asegurarse de que lo que está ofreciendo, ya sea un producto o un servicio, brinde un impacto REAL en la vida de sus clientes.
Innovar es solucionar problemas reales y significativos
Proponer ideas es relativamente fácil, rápido y económico, lo que verdaderamente representa un reto para los emprendedores, es ejecutar adecuadamente sus ideas, aterrizarlas y transformarlas en elementos rentables. Es precisamente en la transformación de ideas a soluciones tangibles en donde los emprendedores suelen perder de vista algo fundamental: si el cliente no percibe un valor agregado en lo que los emprendedores hacen para “innovar su negocio”, no se sentirán atraídos para realizar la compra.
Innovar, tiene una conexión directa con desarrollar soluciones reales y concretas. El proceso implica identificar y enmarcar los desafíos particulares de cada negocio correctamente. Busque la asesoría de los expertos, una guía para poner en marcha el proceso de innovación adecuado para implementar y comunicar las soluciones que su propuesta de negocio brinda.
Puede elegir entre mantener un negocio estático o capacitarse y trabajar por convertir su producto o servicio — y a usted mismo—en eso que todos quieren igualar, en esa idea que tiene un twist que atrae, porque ofrece una solución y efecto positivo que lo diferencia radicalmente lo que existe actualmente.
Para conquistar a los clientes a través de la innovación, es importante evaluar cuál es la situación actual de su negocio y en qué área es conveniente analizar una o más posibles mejoras. Aquí puede encontrar algunos tipos de innovación:
• Innovación de producto: Enfocada en realizar una mejora significativa en los materiales o componentes, en evaluar las características técnicas en cuanto al uso o funcionalidades que aportan un valor único o distinto.
• Innovación de procesos: Se lleva a cabo tanto en los sectores de producción como en los de distribución. Su planteamiento está basado en lograr la disminución de los costos unitarios a través de nuevas herramientas y dinámicas en la línea de producción.
• Innovación en Marketing: Orientada a evaluar y planear estrategias de comercialización nuevas que ofrezcan cambios significativos en diseño, empaque, posicionamiento de la marca, promoción o modificación de precios, y su objetivo central es incrementar las ventas.
• Innovación en organización: Cuya óptica se encuentra en mejorar las prácticas y procedimientos de la empresa, modificaciones en el lugar de trabajo, en la capacitación a los empleados, en las relaciones comerciales con los proveedores. Su propósito es consolidar las capacidades del equipo de trabajo y generar alianzas estratégicas con proveedores.
Atrévase a llamarse “Innovación” y consulte a un asesor de negocios que evalúe adecuadamente su negocio. No caiga en el error de “innovar” haciendo lo mismo que la competencia. Un experto lo puede ayudar a analizar los diferentes ángulos y acciones que ha tomado en el pasado para evitar que caiga en un círculo vicioso que ponga en riesgo el futuro de su negocio.
Consultorías: adriana@adrianab.me 207-717-5060