Alejandra Benítez
Agencia Reforma
MÉXICO, DF, .- Jesús Ramírez está sentado sobre un polvorín, pues en su primera aventura como técnico en el Máximo Circuito, tendrá la obligación de clasificar al América en 13 jornadas, con un equipo que no diseñó y que es uno de los que mayor presión tienen a sus espaldas semana a semana.
Por lo pronto, el timonel dijo que lo primero que quiere es poner orden en el plantel y después ya habrá tiempo para jugar bonito.
“Uno que mas quisiera jugar bonito, agradar, eso sería el ideal de todo el entrenador, pero tenemos que partir de conformar un equipo, un orden y ganar, ya después si podemos jugamos bonito, pero hoy lo fundamental es ganar”, destacó.
Ramírez quien cimentó la obtención de la única Copa del Mundo que tiene México en su historia en la formación de un grupo armonioso de jóvenes, buscará repetir la misma receta con las Águilas, pues además confesó que llega buscando hacer amigos.
“No puedo cambiar mi forma de ser, lo hice con los chavos, lo hice con la Selección mayor, a mi me gusta trabajar en un ambiente de armonía, de tranquilidad, de felicidad, de compromiso y el jugador se tiene convencer.
“El ambiente interno es fundamental y si te sientes feliz lo trasladas a tu rendimiento”, aseguró.
¿Serás amigo de los jugadores?
El nuevo técnico del América no cree que vaya a tener problemas para manejar un vestidor lleno de estrellas, a pesar de que la mayor parte de su experiencia ha sido con jóvenes, pues aseguró que la mentalidad no tiene edad.
“Mi trabajo se basa en el convencimiento de lo que deseas y no hay edades en eso”, detalló.
Por su parte, Michel Bauer, presidente del equipo, aseguró que cuenta con la confianza de Televisa para mantenerse al frente del equipo.
“Estoy a la disposición del presidente de la compañía y cuando así lo considere, lo hará (lo removerá), soy un empleado más del grupo, y estoy aquí para trabajar día a día para la grandeza del club”, apuntó.