México aún lucha para rescatar sobrevivientes tras sismo

Por CHRISTOPHER SHERMAN, PETER ORSI y MARK STEVENSON, AP.

CIUDAD DE MÉXICO (AP) — Rescatistas siguen trabajando con desesperación para rescatar gente atrapada bajo los escombros en la capital mexicana. Mientras tanto, en la colonia Obrera, también continúan las labores de rescate en una fábrica textil derribada por el temblor del martes. “Hay sonidos pero no sabemos si es de dentro o eco de los escombros”, dijo Alejandro Herrera, rescatista de la Secretaría de Gobernación. Hasta el momento habían recuperado tres cuerpos y a pesar de la oscuridad y la lluvia había dos grúas trabajando para retirar trozos de pared del lugar. “Todos somos uno cuando se trata de salvar una vida o ayudar a una víctima”, dijo el presidente Enrique Peña Nieto en un mensaje nocturno que dirigió a la nación. El gobierno llevará a cabo un plan en tres etapas: apoyo a damnificados con albergues y restablecimiento de servicios públicos básicos, elaboración de un censo exhaustivo de daños materiales para iniciar proceso de restauración y reconstrucción —que implica la demolición de edificios con daños estructurales irreparables— y la remoción de escombros.En diversos puntos de la ciudad se observan bomberos, policías, soldados y civiles con martillos y palas en las manos tratando de retirar los restos de los derrumbes y rescatar a tantas víctimas como fuera posible. Uno de los puntos de mayor interés fue la escuela Enrique Rébsamen, en la Ciudad de México, donde la estructura de tres pisos se vino abajo y dejó a adultos y alumnos bajo los escombros. Según las autoridades, murieron al menos 25 personas, entre los que se hallaban 21 niños. En Atzala, en el estado de Puebla, sus habitantes recordaban a 11 familiares que perecieron dentro de una iglesia mientras asistían al bautizo de una niña de dos meses.

Desplazados por sismo buscan refugio

En colchonetas de goma extendidas en un centro recreativo de Ciudad de México, la familia Montero se cobijaba bajo mantas de lana, sus primeras nuevas posesiones después de que un mortal sismo de magnitud 7,1 les hiciera abandonar su apartamento. Se cree que en toda la capital hay miles de mexicanos que se han quedado sin hogar, después de que el temblor del martes allanara edificios enteros y dejara otros al borde del colapso. Hombres, mujeres y niños llenan ahora gimnasios y salones de actos en más de dos docenas de inmuebles designados como refugios. Muchos no tienen claro a dónde irán después, aunque agradecen estar en un lugar seguro. Óscar Montero, de 7 años, dijo que allí estaba tranquilo de que nada fuera a caerse. El sismo registrado a las 13:14 del martes tuvo una magnitud de 7,1 grados y el epicentro se ubicó cinco kilómetros al noreste de la localidad de Raboso, en el estado de Puebla. Buena parte de la Ciudad de México se alza sobre el lecho de un antiguo lago y el terreno puede amplificar los efectos de los temblores centrados a cientos de kilómetros.