Georgina Montalvo
(Agencia Reforma)
Una acción tan simple como lavarse las manos puede mantenerlo a salvo de salmonelosis, gastroenteritis y hepatitis B; también evitar que infecciones respiratorias deriven en sinusitis, neumonía o bronconeumonía.
Así lo advirtió Tomás de la Mora Chávez, director del Hospital General Troncoso del IMSS, en el marco del Día Mundial del Lavado de Manos, instituido por el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), que se celebró el 15 de octubre.
Como parte de la conmemoración, el Programa de Educación en Salud e Higiene Personal (PHASE) sugiere cuatro consejos básicos: lavarse las manos antes de comer, después de ir al baño, lavarse para evitar portar el virus de la gripe, en cualquiera de sus modalidades, y difundir entre amigos y familiares el hábito de lavarse las manos.
Siguiendo estas acciones es posible prevenir una infección y que llegue a ser mortal, pues cada año mueren casi 3 millones de personas en el mundo sólo por causa de enfermedades relacionadas con la diarrea.
UNICEF instituyó el Día en 2008 porque 5 mil niños menores de 5 años mueren a diario a causa de enfermedades diarréicas que son prevenibles.
El organismo también señaló que, al lavarse adecuadamente con agua y jabón, se logra reducir la incidencia de infecciones respiratorias en 23 por ciento, entre ellas la neumonía, que anualmente cobra la vida de 1.8 millones de infantes.
Según Mora Chávez, sólo 20 por ciento de los mexicanos se lava las manos correctamente y ante la posibilidad del rebrote de influenza A H1N1 y la presencia de influenza estacional, este hábito es fundamental en la prevención de ambas.