Por SOPHIA TAREEN
Associated Press
CHICAGO (AP) — Tania Unzueta por fin decidió revelar su condición migratoria que había mantenido en secreto durante más de 10 años: es indocumentada.
La graduada, de 26 años, de la Universidad de Illinois, en Chicago, fue una de las decenas de inmigrantes jóvenes que hicieron pública su situación migratoria durante protestas efectuadas el miércoles en diversos estados.
Los indocumentados confían en que sus historias atraigan la atención sobre las dificultades en las que viven unos 12 millones de inmigrantes ilegales en Estados Unidos y renovaron sus exhortos a favor de una reforma federal, a pesar del peligro de que sean deportados.
“Da miedo por un lado, pero al mismo tiempo se siente liberación”, dijo Unzueta, una de ocho personas que revelaron su condición migratoria durante una movilización efectuada en el centro de Chicago, donde reside. “Siento como si hubiera estado oculta mucho tiempo”, apuntó.
Cientos de personas, que portaban banderas de Estados Unidos y pancartas que decían “Indocumentados y sin miedo”, observaron cuando cada uno de los ocho oradores tomó el micrófono y prometieron que continuarían contando su condición migratoria a otros.
Actos similares estaban previstos para el miércoles en Detroit, Nueva York y en la Universidad de Harvard en Cambridge, en tanto que están programados otros más para las próximas semanas en Los Angeles.
Algunos activistas llamaron al miércoles el “Día Nacional del Fin de la Clandestinidad” y citaron en sus testimonios a defensores de los derechos homosexuales, como el extinto Harvey Milk, uno de los primeros funcionarios elegidos que declaró su homosexualidad en público.
Los expertos afirman que ha aumentado la táctica de mostrarse en público, en especial entre los activistas jóvenes.
Muchas personas han participado en marchas, escrito cartas y visitado a legisladores tras la reactivación del movimiento a favor de los derechos de los inmigrantes en el 2006, cuando más de medio millón de personas marcharon en diversas ciudades del país para impugnar un proyecto de ley que consideraban perjudicial para los inmigrantes.