¿Qué quieres estudiar?

Israel Rivera

Agencia Reforma

“Esta toma de decisión es algo que se va construyendo, porque saber qué queremos ser o a qué nos queremos dedicar no es algo que se da en un momento determinado de la vida”, explica la psicóloga Ruth Méndez.

Primero, los niños quieren ser como papá, como mamá o como su superhéroe favorito; después buscan oficios más concretos, como maestro o bombero; para finalmente reafirmarse en una serie de profesiones de acuerdo a sus gustos.

Por ello es esencial que los padres se vuelvan facilitadores y en lugar de entorpecer la decisión de sus hijos con comentarios negativos, les ayuden a reconocer sus capacidades y sus limitaciones.

“Muchos padres quieren que sus hijos decidan qué carrera quieren estudiar cuando están en la secundaria y esa es una presión muy grande para los chicos, lo mejor es observar sus habilidades y preferencias desde que son pequeños para poder orientarlo cuando llegue el momento”, recomienda Méndez, psicóloga de consulta privada y del Centro de Orientación Educativa de la UNAM.

El papel de los padres debe ser el de acompañantes a lo largo de su desarrollo, con la finalidad de brindarles información y apoyo para evitar que tomen decisiones precipitadas en función de lo que les dicen sus amigos o de lo que perciben a través de los medios de comunicación.

Una buena forma de ayudarlos es hacerles ver con qué aptitudes cuentan para desarrollar la profesión que desean y buscar toda la información posible sobre esa carrera que les permita una elección responsable.

“La trayectoria escolar a los padres podría ayudarles a ver en qué materias los chicos se distinguen u obtienen una aprendizaje más significativo”, dice María Isabel Gutiérrez, coordinadora académica del Posgrado en Pedagogía de la Universidad Panamericana.

Otra opción, indica Gutiérrez, es buscar fuera de las carreras más conocidas como Medicina, Derecho o Ingeniería, profesiones de reciente apertura o que se imparten en otras ciudades.

“Si en la escuela no se les da la orientación adecuada, es conveniente que los padres busquen ayuda de un profesional para que puedan aplicarle una batería de pruebas específicas de orientación vocacional que les ayuden a tomar esa elección”, comenta la pedagoga.

Si su elección está entre dos carreras muy diferentes, lo ideal sería ubicar, de acuerdo a sus aptitudes, cuál es la profesión más adecuada, o bien, buscar a familiares y amigos que se dedican a ellas para que les platiquen su experiencia.

“A veces como papás se nos olvida que también nosotros pasamos por esa etapa, por eso los invito a que mejor les ayuden a transitar de una mejor manera por ese proceso”, dice Méndez.

Y tú ¿qué clase de padre eres?

1. De los que dicen a sus hijos de manera explícita qué es lo que quieres que estudien porque quieres heredarle el consultorio, el despacho o el negocio familiar.

2. De los que le dicen a sus hijos que no estudien cierta carrera porque crees que no se gana bien, no existen oportunidades de empleo o porque a ti no te ha ido bien.

3. De los que no les preguntas qué es lo que quieren estudiar y aunque sabes que no cuenta con las capacidades para ejercer cierta profesión los dejas avanzar.

4. De aquellos que permiten que la decisión final la tomen sus hijos, pero que procuran acompañarlos y brindarles la información necesaria para que tomen una decisión responsable.