NATALIA CANO
MEXICO (AP)
El director Rafael Lara dijo que la exhibición de la película protagonizada por los mexicanos Silvia Navarro y Jorge Salinas en ambos países se debe a un esfuerzo por erradicar la piratería.
“A veces sucede que las películas mexicanas llegan a Estados Unidos mucho tiempo después de que se estrenaron en México, y eso también incita a que copien los materiales que se pueden conseguir de forma ilegal en la frontera norte”, dijo el realizador el martes en conferencia de prensa.
México forma parte de los países que se negaron a firmar el Acuerdo Comercial Anti-Falsificación (ACTA), en un acto realizado en días pasados en la capital japonesa, en el que Estados Unidos, Canadá, Australia, Marruecos, Corea del Sur, Nueva Zelanda, Singapur y Japón se manifestaron a favor de fortalecer sus acciones en contra la falsificación, incluyendo delitos contra los derechos de autor y el robo de marcas comerciales.
El ACTA tendrá efecto a partir de 2012, de acuerdo con la Oficina del Representante de Comercio de Estados Unidos.
“Labios rojos” se estrenará en México el viernes con 180 copias para su distribución, mientras que a Estados Unidos llegará con 70 copias que se exhibirán en algunas de las ciudades con mayor población mexicana. Lara espera que la llegada de su película a Latinoamérica no demore mucho después de su paso por los países mencionados.
El filme producido por el mexicano Jorge Aguirre aborda la historia de Ricardo (Salinas), un publicista exitoso casado con la bella y joven ama de casa Blanca (Navarro).
Ambos atraviesan una crisis de pareja causada por la incipiente y sorpresiva disfunción sexual de Ricardo, problema que de acuerdo con la doctora Claudia Rampazzo, terapeuta y educadora sexual del Hospital Español de la Ciudad de México, enfrentan 8 millones de varones mayores de 40 años en México.
Salinas confesó que se sintió muy identificado con el personaje de Ricardo, pues al igual que el protagonista, él también se ha enfrentado, en algún momento, a la disfunción eréctil.
El actor aprovechó para admitir que su participación en “Labios rojos” le sirvió para burlarse un poco de sí mismo, tras verse involucrado en situaciones incómodas en su vida personal con sus anteriores parejas.
“Por mi vida descarriada y por situaciones en las que no he querido estar, y sin embargo, he estado involucrado, ésta era la oportunidad perfecta para burlarme de mí mismo, por eso acepté, porque era la antítesis de lo que soy, así como hice en la película ‘La otra familia’, esta era la situación perfecta”, confesó.
Salinas también comentó que si bien el trabajo realizado con sus compañeros de elenco y el director le aportó una buena experiencia, no quedó del todo satisfecho con los resultados.
“Me exijo mucho en el trabajo, y el resultado fue maravilloso, pero a casi cuatro años de haberse filmado la película, sé que pude haberlo hecho mejor. Soy muy crítico conmigo mismo”, explicó el también protagonista de la película “Sexo, pudor y lágrimas”, del mexicano Antonio Serrano.