Luis Homero Echeverría
Agencia Reforma
Por arte de magia Edgardo Codesal no cambiará al arbitraje mexicano ni eliminará los errores en los juegos.
El jefe del Área Técnica en la Comisión de Árbitros aceptó la existencia de algunas fallas en los trabajos de los colegiados después de dos jornadas en el Clausura 2015, pero defendió la marcación del penal en contra de Leones Negros en el partido del pasado viernes.
“No somos magos ni Roma se hizo en un día. Aquí hay ocho, 10 años de ciertas circunstancias, de instrucciones que tenemos que cambiar, cambiar el chip mental de todo mundo para dar los resultados que se tienen que dar.
“Lo que se trata es de seguir trabajando para que ellos (árbitros) encuentren la ubicación más idónea para que puedan ver la jugada, sobre todo cuando es dentro del área. Tienen que meterse más a fondo, tener mejor ángulo, intuir la jugada y estar presentes con más concentración”.
Aceptó equivocaciones de silbantes como el penal que no se le marcó a Joel Huiqui, en el Morelia-Atlas o sobre Mauricio Romero en el partido del Puebla.
“Son los que puedo decir que el árbitro no estuvo con toda la atingencia para poderlos señalar”, dijo.
“No vamos a ocultar, pero sí vamos a defender con toda la pasión cuando el árbitro está en lo correcto”.
Detalló el porqué el árbitro Miguel Ángel Flores marcó como penal la jugada al final del duelo de la U de G.
“Estuve en el partido de Querétaro, el ángulo de visión del árbitro era el correcto, muy cerca de la jugada. Evidentemente el jugador del Querétaro va hacia atrás, va a brincar y el jugador de U de G ocupa el espacio de la espalda y le da un ligero empujón sobre la cintura, lo desplaza”, explicó.
“Creo que si lo analizamos fuera de los equipos, fuera del cociente, fuera de todas las circunstancias, y si lo trasladamos al 3′, entiendo que es falta y el árbitro la marcó. Lo que pasa es que se carga porque es U de G, por el 93′ y porque U de G pensaba que ya tenía un punto en la bolsa”.
Sobre el tanto que se le anula a Pumas ante Chivas, señaló que sólo a través de la televisión puede determinarse que Darío Verón estaba en posición correcta.
“Solamente lo vimos en la televisión, que un zapato habilitaba, pero en la cancha, en el momento, todo mundo dijo fuera de lugar”.